Uros Rivas comienza su fase de ascenso ganando con autoridad a Salamanca

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Foto: MIGUEL ÁNGEL POLO

Se impuso (80-65) a USAL La Antigua, un conjunto con vitola de ‘hueso’, y se coloca segundo del grupo empatado a una victoria con Valencia, que solucionó su partido contra La Zubia con un aplastante 74-97.

Sobresaliente partido de Uros Rivas ayer, jueves, en su debut en la fase de ascenso a LEB Plata. En la Fonteta se impuso con autoridad (80-65) a USAL La Antigua, conjunto salmantino que llegaba con vitola de hueso duro de roer. No en vano había sido campeón del grupo A de Liga EBA y todos le daban como uno de los favoritos de esta fase.

Los de Juanjo Simón comenzaron el partido hilvanando el juego sin dejarse llevar por los nervios ni impresionarse con los dos mates que el pivot salmantino Omar Lo les endosó en los primeros minutos de juego. Al tran tran, acariciando cada jugada y sin perder balones apenas, colocó el primer triple justo en el ecuador de este primer periodo y con él su primera ventaja de cuatro puntos. A partir de ahí, a pesr de la defensa pegajosa de los salmantinos, Uros fue abriendo brecha hasta colocarse con 19-9 a falta de un minuto. La diferencia fue suficiente para seguir jugando el tiempo restante con calma, sin nervios. Tras el último ataque fallido de USAL, Uros quedó con posesión a falta de 20 segundos y aprovechó la ventaja para anotar el 22-11 con que se cerró el cuarto.

El segundo periodo comenzó con un nuevo triple, esta vez de Ángel Gómez, pero era USAL el que conseguía ir remontando. Un triple de Guillem, una de las estrellas salmantinas, seguido de una pérdida de balón de los ripenses y de una falta en ataque de De Barros llevó el partido a un 25-21 que obligó a Juanjo Simón a pedir tiempo muerto. Siguió remontando Salamanca tras el mismo, hasta ponerse en 25-23, máximo acercamiento en todo el encuentro. Fue el momento elegido para una gran asistencia a Sargent que forzó el 2+1 bajo el aro, aunque falló el adicional para dejar el marcador en 27-23. Tras dos grandes defensas de los de negro, el luminoso volvió a reflejar una ventaja sustancial (33-23) a 4:30 del descanso. Fueron los momentos de Sargent, que sacó oro bajo el tablero contrario, forzando personales que dejaban a los salmantinos con 4 a falta de cuatro minutos, por una sola falta en el casillero ripense. Así seguía dos minutos después el balance de faltas, pero USAL lo incrementó, gracias en parte a Sargent, pero también a los propios errores de los del Tormes cometiendo faltas absurdas que hacían engordar el casillero de Rivas. Al final del cuarto, los ripenses se iban al vestuario con un suficiente 43-32

Reacción insuficiente

El tercer periodo mostró a un Salamanca más decidido y con más acierto. La imprecisión en buena parte de los ataques de la primera mitad dio paso a un ajuste fino que hizo engordar su casillero, al tiempo que subían un punto la intensidad defensiva, bloqueando buena parte de los ataques ripenses. Periodo de pocos puntos que los salmantinos consiguieron embolsarse, aunque por la mínima (16-17), para llegar al final del tiempo con un 59-49 que dejaba a los ripenses en una cómoda posición para enfrentar el final.

En el último cuarto fue cuando la ciencia de Uros salió a relucir. Fue quizás el periodo en que más hizo valer ese jugar de memoria que da la compenetración de un conjunto cuyos jugadores, en la mayoría de los casos, llevan jugando juntos varios años. Y, desde luego, de un entrenador que les acompaña también desde hace suficientes temporadas para conocer en qué punto se encuentra cada jugador. De Barros y Sargent comenzaron a apoyarse más el uno en el otro y Gabriel Gil destapó el tarro de las esencias. Ángel Zamora hizo circular siempre bien el balón y asistió y contragolpeó con esa ciencia de la que hablábamos, alzándose como MVP al final del partido (17). Muy de cerca le siguieron en valoración Gabriel Gil (16) y Julien Sargent (15). Máximo anotador de Uros y del partido fue Frutos, con 19 tantos, un verdadero sostén del equipo.

La ciencia de Uros es, sin duda la economía. Quizás sea uno de los conjuntos con una edad media más alta de esta competición, y eso les ha hecho aprender a jugar sin despeinarse, buscando las jugadas que saben que les van a salir bien. Frente a las figuras salmantinas (mención especial para el senegalés Omar Lo, un pivot con mucho empuje bajo el aro contrario aunque perdió la batalla defensiva contra Sargent), Uros fue ayer lo que siempre busca ser: un equipo donde unas veces u otras siempre destaca alguien, pero en el que todos empujan, defienden y anotan.

Por su parte, el CB Valencia, el verdadero favorito por jugar en su cancha, se impuso a La Zubia (74-97) y se coloca primero del grupo gracias al basketaverage. Una victoria abultada que puede ser decisiva para la clasificación final del subgrupo.

Estadísticas del partido