San Isidro, el día con más tradición en las Fiestas de Mayo en Rivas, amaneció soleado y más bien caluroso, acompañando así las distintas celebraciones que se hicieron ayer. El Casco Antiguo fue, como es habitual, protagonista especial del jueves, con la procesión del santo, la caldereta, el mercadillo artesano y demás componentes. En el recinto ferial, Melendi arrasó con su atracción sobre un público muy mayoritariamente adolescente que aguantó hasta ocho horas bajo el sol para obtener su entrada y, después, para acceder al recinto del auditorio. Las casetas vieron cómo se doblaba, prácticamente, el público habido el día anterior, y en muchos casos reconocieron haber hecho en un solo día una caja igual a la alcanzada en todos los días de las Fiestas del pasado año.
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La participación en las distintas atracciones y eventos programados en el Casco Antiguo fue altísima, y la calle principal del recinto junto al Parque San Isidro se veía absolutamente rebosante de público. Un original espectáculo callejero con pompas de jabón, en la Plaza de la Libertad, atrajo especialmente la atención de mayores y pequeños. Estos último pudieron participar después en un taller de pompas. En el aspecto gastronómico, la popular y tradicional caldereta puso también el «cartel de completo», a pesar de que Platos y Tapas, la empresa granadina encargada del catering, había utilizado nada menos que 300 kilos de magro de cerdo, 50 de pimientos y otros tantos de tomates, 60 de cebolla, 70 de patatas, 80 de zanahorias, 5 litros de vino blanco, 2 de coñac y 2 kilos de sal, que así contaron a Rivas Actual los ingredientes y dosis para realizar el plato. La procesión en la que se saca la imagen de San Isidro tuvo su público fiel también y fue acompañada por la charanga de la Agrupación Musical de Mejorada del Campo. La iglesia del Casco fue escenario del concierto ‘La rosa del Sur’, interpretado por un cuarteto de cuerda.
En el recinto ferial destacó la considerable fila de jóvenes que desde las once de la mañana se habían instalado en la entrada del auditorio, a la espera de obtener su entrada para el concierto de Melendi, esa misma noche. La mayoría de los jóvenes había adquirido previamente su entrada, pero aguardaron todas esas horas para entrar de los primeros al recinto del auditorio y poder elegir así un lugar lo más cerca posible de su ídolo. La calle de las casetas feriales comenzó a poblarse de público desde horas tempranas de la tarde y la afluencia fue excelente. Muchas casetas reconocieron haber hecho una caja igual a la que hicieron en todos los días de fiestas del año pasado.
El suceso lamentable fue el ataque que sufrió la sede del PP de Rivas, que ha amanecido hoy con un fuerte impacto en la luna de su cristalera y unas pintadas insultantes. Los responsables del partido dieron cuenta de algún altercado producido el día anterior en su caseta en las fiestas, en el que tuvo que intervenir la Guardia Civil.
