El Ayuntamiento Rivas Vaciamadrid anunció el pasado martes su decisión de personarse en la denuncia, que presentó la FAPA (Federación de Padres y Madres de Alumnos) Giner de los Ríos el pasado otoño, contra la Comunidad de Madrid por posible delito de prevaricación en la concesión de un concierto educativo al colegio Santa Mónica.
La iniciativa del Consistorio de Rivas se une a dos requerimientos presentados (en los meses de julio y septiembre) ante la propia Consejería de Educación, y al recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (admitido a trámite el pasado 21 de noviembre), en los que se ponía en cuestión la legalidad del proceso de adjudicación de un concierto que, bajo el criterio de la parte denunciante, incumple la propia norma que lo regula. En el texto de su querella, presentado el pasado 8 de septiembre, la FAPA Giner de los Ríos argumentaba “que no se puede dar un concierto a un centro que no ha empezado su funcionamiento y que ni siquiera se ha empezado a construir”, en referencia al colegio Santa Mónica.
Denuncia del abandono
Desde el Ayuntamiento de Rivas se apoya la solidez legal del racionamiento expresado en el texto de la denuncia. Su concejal de Educación, Curro Corrales, se une a la crítica de este concierto educativo. “No podemos quedarnos con los brazos cruzados viendo cómo la Comunidad de Madrid no respeta el cauce legal al que estamos obligadas las administraciones, en una materia tan sensible como la financiación con dinero público de negocios privados”, denuncia el edil ripense, que añade: “Venimos reclamando el escrupuloso cumplimiento de la ley, que es igual para todo el mundo, aunque el Gobierno regional parezca tener distinta vara de medir según la afinidad ideológica”.
El colegio Santa Mónica está promovido por una fundación católica que también es la propietaria del colegio Alborada de Alcalá de Henares, en el que ha estudiado el alumnado que se matriculó en el colegio de Rivas para este curso. El centro proyectado para Rivas no ha empezado aún a construirse.
Mientras, en Rivas hay cientos de familias con niños y niñas en edad escolar que reclaman desde hace años un nuevo centro educativo público para la ciudad, en el joven barrio de La Luna, que la Comunidad de Madrid se comprometió en julio pasado a tener en funcionamiento el próximo curso 2015-2016, y para el que el Ayuntamiento ha cedido una parcela pública municipal. Sin embargo, el viceconsejero regional de Educación, Manuel Pérez Gómez, se desdijo de este compromiso en una carta remitida al Ayuntamiento el pasado 4 de diciembre, condicionando la construcción del centro público en La Luna a que el colegio Santa Mónica viese la luz.
La decisión de personarse en esta denuncia por posible delito de prevaricación contra la Comunidad de Madrid por el controvertido concierto educativo coincide con las informaciones aparecidas en las últimas semanas en varios medios de comunicación de difusión estatal sobre prácticas ilegales que vinculaban la construcción de colegios privados al lucro de los responsables de la trama Púnica, a la cabeza de la cual se ha incriminado al exconsejero del PP y vicepresidente en el Gobierno de Esperanza Aguirre, Francisco Granados.