Rivas Ecópolis dejó ayer, martes, el título de la Supercopa 2013 en manos del Perfumerías Avenida, vigente campeón de Liga, por un escasísimo margen (62-57) que a cinco segundos del final del partido era aún menor (60-57). Las ripenses se impusieron destacadamente en la primera mitad, pero alguna falta de concentración y un aumento de la presión local igualaron el partido en la segunda.
Rivas Ecópolis tuvo de manera muy notable el mando del partido durante toda la primera mitad del mismo. Las diferencias que el equipo de José Ignacio Hernández puso en el marcador de salida (2-8 en los primeros minutos) marcaron el guión del encuentro en los dos primeros cuartos. A sólo dos ataques del final del segundo, Rivas ganaba por diez puntos y sólo un par de acciones un tanto afortunadas de las salmantinas consiguieron rebajar la diferencia a seis al sonar la bocina para ir al vestuario.
Víctor Lapeña, el entrenador de Perfumerías, se había mostrado muy seguro de cara a su plantilla cuando le daba instrucciones en el primer cuarto: «Estad tranquilas, ellas van a fallar», se le oyó decir en un tiempo muerto, en la retransmisión de Teledeporte. Avanzado el segundo cuarto, el mensaje había cambiado ligeramente: «El objetivo es empatar al descanso». Un par de minutos más tarde, volvía a cambiar: «Que la diferencia no sea mayor de seis».
Esto último sí lo consiguió el técnico salmantino, que en un par de jugadas con ligero despiste ripense consiguió, gracias a una colosal Murphy, rebajar de diez a seis la diferencia en el luminoso. 27-33 al descanso tras una primera parte en la que Rivas Ecópolis supo a qué jugar y Perfumerías Avenida, no tanto.
Las ripenses habían efectuado un gran juego en defensa presionando la línea exterior salmantina para dificultar el pase interior, donde los centímetros de las pivot de Perfumerías se volvían letales para la defensa de Rivas. En alguna ocasión lograron recibir el balón bajo el aro ripense tanto Rezan como Robinson, pero no fue la tónica general gracias a la excelente colocación para el rebote por parte de Schumacher, Allison y Nicholls, y a un gran trabajo en el perímetro defensivo.
En la segunda mitad, como suele ocurrir, las cosas cambiaron. Avenida se acercó rápidamente a los dos puntos de distancia gracias a Xargay y Murphy, con la evidente colaboración de Robinson y Rezan. Sin embargo, Rivas no perdió en ningún momento los papeles y siguió respondiendo con tiros de Eldebrink, de una acertada y descarada Gaby Ocete (gran manejo del partido en las fases que actuó de directora del juego) y, sobre todo, gracias a una Rachel Allison divina. Y lo decimos en el sentido de que si a Dios se le atribuye la capacidad de estar en todas partes, Allison fue Dios en este partido. Capturó rebotes bajo su aro y bajo el aro rival, forzó lucha en balones que ya estaban en las mano de las rivales y cortó pases que eran canastas. Penetró a canasta y tiró, yendo a por su propio rebote y capturándolo en ocasiones. Toda una lección de pundonor y concentración que empalideció un trabajo similar, pero de mucho menor brillo, en sus compañeras.
Pero en el lado de las rivales hubo quien se equiparó con ella, que no fue otra que Murphy. Su trabajo tuvo las mismas características divinas y se erigió por méritos propios en MVP del partido, gracias sobre todo a ese triple en solitario desde la esquina que a 18 segundos del final ponía una decisiva ventaja de tres (60-57) en el marcador. En esa situación, Hernández diseñó una gran estrategia que consiguió dejar a Vega Gimeno con un tiro relativamente cómodo desde la esquina, cuando todo Perfumerías había apostado a que sería Eldebrink la receptora del balón para intentar el triple. La estrategia salió bien, pero el tiro, no, aunque le faltó muy poco.
Con esa única ocasión de empatar el partido ya perdida, la falta inmediata posterior de Rivas era inevitable, de ahí los dos puntos adicionales por tiros libres que sirvieron para dejar el marcador de la Supercopa en ese 62-57 que campeaba en el luminoso.
Gran partido, pues de Rivas Ecópolis y, como es habitual, gran gestión de los minutos finales por parte de Perfumerías. El partido sirvió, sobre todo, para dejar sentado que la Liga de este año volverá a ser competida. José Ignacio Hernández ya debe tener claro, si es que no lo tenía antes, que la Liga volverá a decidirse en los últimos minutos de cada partido que enfrente a ripenses y salmantinas.