Cuatro representantes de la Asociación Asociación Rivas Contaminación Zero se han reunido con el capitán de la Guardia Civil responsable del servicio de Seprona para Madrid y dos de los Guardias Civiles destinados en la central que el Seprona mantiene en Rivas, para trasladarles su preocupación sobre los vertederos existentes en la localidad, especialmente sobre la zona de vertidos ilegal que se ha establecido en la zona posterior de la Casa de Asociaciones.
No obstante, también hablaron del de Valdemingómez, sobre el que se está trabajando para clausurarlo; y otra zona donde se acumula una “cantidad inmensa de residuos”, el espacio ingente en la carretera M-823 – después de pasar la Cañada en dirección a Vicálvaro y en su margen derecho.
Los ripenses le entregaron un dossier explicativo e imágenes sobre todas estas áreas, ubicándolas en el plano para que los agentes tengan mejor constancia de dónde existe el conflicto.
Desde la asociación han destacado el «interés e implicación» de la Guardia Civil a este respecto, aunque han hecho hincapié en la «absoluta necesidad» de dotar a Rivas de más medios humanos del Seprona por la zona «de gran deterioro» que representa.
«No puede resolverse nada con cuatro guardias civiles para unos 13/15 municipios», han aseverado.
