Rivamadrid, una empresa pública modélica que no debe dejar de serlo

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19/06/2014

La empresa pública de servicios Rivamadrid ha renovado su Consejo de Administración y lo ha hecho de la peor manera posible, sin el diálogo y consenso imprescindibles para reforzarla. El conflicto está servido y su responsable directo es Pedro del Cura, presidente de esta empresa pública y alcalde de Rivas Vaciamadrid.

La Junta General extraordinaria de esta empresa fue convocada el miércoles 18 de junio para designar el nuevo Consejo de Administración después de la toma de posesión del actual gobierno municipal. Los cambios que su presidente proponía auguraban mucha tensión y ésta tardó poco en aflorar. Tras una pátina de democracia renovada, la propuesta de Pedro del Cura consistía básicamente en colocar en su Consejo de Administración al representante de la derecha más rancia, desacreditada y populista de nuestra ciudad.

El concejal del CDR, que a lo largo de esta legislatura se ha caracterizado por su mudez Pleno tras Pleno, recuperó el habla en los últimos meses para secundar la mentira de Pedro del Cura y el Informe de la Cámara de Cuentas de Madrid. Favor con favor se paga y hoy este concejal cobrará sus buscadas dietas como nuevo consejero de la empresa pública Rivamadrid.

Sin diálogo y sin consenso también se ha impuesto un gerente en la sombra. En este caso con la excusa de dar una imagen de municipalización en una empresa que siempre ha sido 100% municipal. Ni transparencia, ni eficacia, ni mayor participación y sí mucha confusión. El nuevo Consejo de Administración intenta ocultar el déficit del actual equipo de gobierno y su incapacidad para la búsqueda de consensos y, lo que es peor, demuestra que el “atado y bien atado” de otros tiempos orienta las nuevas formas de gobernar en nuestra ciudad.

El Partido Popular ya ha manifestado su decisión de no participar en un órgano público que califica de circo. El PSOE abandonó la Junta extraordinaria del 18 mostrando así su rechazo ante tanta imposición. Tres de los concejales de Izquierda Unida tampoco asistieron por considerar que la propuesta de nuevo Consejo atendía a una indecente compra de voluntades y carecía de transparencia, diálogo, y consenso.

Rivamadrid es una empresa pública que suministra de forma ejemplar múltiples servicios a nuestra ciudad y de la que dependen más de 450 familias. Desde RivasXlaIzquierda entendemos que a esta empresa se le ha generado un conflicto innecesario. De seguir por el camino del autoritarismo emprendido por Pedro del Cura el riesgo de que esta empresa deje de ser un ejemplo de servicio público será una realidad. Exigimos al actual alcalde que reconsidere su decisión y recupere la senda de la búsqueda de consensos y mayorías que hasta hace poco era la seña de identidad de nuestra ciudad.

RivasXlaIzquierda