Radio Cigüeña entregó su Trofeo a la Deportividad

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Foto de archivo de la entrega del premio al presidente de La Meca de Rivas, Julián Merino, en 2014 (Foto cortesía de Radio Cigüeña)
Julian Merino, con su trofeo, acompañado por José María Playán (Radio Cigüeña) y Vicente Temprado, presidente de la Federación de Fútbol Madrileña (Foto cortesía de Radio Cigüeña)
Julian Merino, con su trofeo, acompañado por José María Playán (Radio Cigüeña) y Vicente Temprado, presidente de la Federación de Fútbol Madrileña (Foto cortesía de Radio Cigüeña)

En medio de un ambiente relajado y deportivo, con las autoridades políticas municipales, los directivos de la Federación de Fútbol de Madrid, todos los clubes de fútbol de Rivas Vaciamadrid, y Julián Merino, presidente de La Meca de Rivas y ganador del trofeo a la Deportividad de este año recogiéndolo de manos del ex árbitro Valentín Pizarro, se pasó la tarde noche del lunes 6 de octubre en el Polideportivo Parque Sureste.

Pero los verdaderos protagonistas fueron los imprescindibles. Durante un rato se hizo visibles a los invisibles, a esas personas humildes, trabajadoras, todoterrenos, indispensables, que son el alma de las agrupaciones deportivas y que durante ese acto se sintieron con la importancia que merece su oscuro pero brillantísimo esfuerzo.

Estos vecinos fueron los galardonados: Lorenzo Torres García, reconocido ya con anterioridad como Presidente de Honor de su club, recibió su diploma, su insignia, su botella de Bodegas Sers y el cariño y una gran ovación de los presentes. Valentín Ruiz Fernández, trabajador incansable, bondad y educación, formador donde los haya y siempre con la sonrisa en la boca, fue el segundo homenajeado.

Después, en ausencia, pues su gran corazón le había dado un susto esta semana y estaba en el hospital, Antonio Belinchón Pérez, un directivo al que no se le puede encontrar en el palco, sino recogiendo balones, arreglando riegos, organizando a los niños… Recogió el diploma su hijo.

Y finalmente, Mariano Encinas Lázaro, entrenador modesto donde los haya. Según dice él, «lo mejor de ser entrenador es encontrarse con los niños que han estado bajo tus órdenes y verlos convertidos en hombres». Y por ello le entregó el diploma David Barca (Torito), que empezó con él de alevín y en la actualidad juega en el Rayo Vallecano B.