Esta mañana ha sido presentado en la sede de Rivamadrid el primer generador de energía eólica instalado en Rivas. Se trata de un aparato «absolutamente innovador», según las empresas realizadoras del proyecto, Reacción Uptheworld y JCM Bluenergy, que mejora el rendimiento de los tradicionales molinos hasta en un 70% gracias, sobre todo, al aprovechamiento de las corrientes turbulentas que el viento produce a bajas velocidades.
El aerogenerador funciona desde que se instalara el pasado mes de julio, como proyecto piloto, y la energía que genera se utiliza en las dependencias de Rivamadrid. Las empresas que participan en la iniciativa, con las que el Ayuntamiento de Rivas firmó un acuerdo este año, están actualmente midiendo los resultados. La iniciativa piloto, que fomenta la I+D+i [investigación, desarrollo e innovación], busca el desarrollo del proyecto denominado Test e integración de la nueva tecnología EOLI FPS1000 en cubiertas de edificios municipales, que establece la instalación del prototipo de aerogenerador para medir los resultados y comprobar su eficiencia práctica.
Las empresas responsables del proyecto, Reacción Uptheworld y JCM Bluenergy, han explicado que su generador consigue mejorar el rendimiento en producción de energía eléctrica hasta en un 70% respecto al ofrecido por los tradicionales molinos tripala que durante años han poblado multitud de paisajes de la geografía española. Gran parte del secreto de este mayor rendimiento reside, según estas empresas, en el aprovechamiento que el Eoli FPS1000 hace de las corrientes turbulentas, como se denomina a las que el viento produce cuando sopla a baja velocidad. Se trata precisamente de algo que los generadores al uso no consiguen aprovechar y que permite al nuevo generador ser eficaz durante casi todo el tiempo.
Jorge Contreras, de JCM Bluenergy, ha explicado a los medios que el aparato está aún en fase piloto, pero «testado y avaladas las mediciones y resultados por la Universidad Complutense de Madrid», lo que supone «una garantía absoluta de que el proyecto es una realidad». El aparato está siendo instalado en diversas empresas e instituciones españolas, así como en puntos fuera de España en los que ya se han interesado por él.
La comercialización del generador, que tiene la ventaja fundamental de su reducido tamaño y peso respecto a los molinos (aproximadamente unos 130 kilos y 1,5 metros de diámetro, según puede verse en la foto que acompaña a esta crónica), está aún pendiente de la finalización del periodo de desarrollo y de la aprobación de la legislación que lo contemplará. Según Contreras, los aparatos instalados hasta la fecha en distintos puntos, bajo la condición de instalaciones piloto, están saliendo, ya instalados, por unos 12.000 euros. «Estimamos que una vivienda estándar sin acceso a energía eléctrica normal que quisiera hoy por hoy instalar uno, podría estimar su coste, ya instalado, en unos 17.000 euros» si al generador se le añaden dos placas fotovoltáicas que aseguren la continuidad de la generación en cualquier condición climatológica. No obstante, el responsable de JCM Bluenergy asegura que en la fase de comercialización su objetivo es poder ofrecer el aparato ya instalado por un precio similar al de un generador de palas, que ronda los 6.000 euros.
Colaboración municipal
El proyecto se enmarca dentro del Plan de ciudad ‘Rivas Emisiones Cero’, que pretende conseguir un municipio neutro en emisiones de CO2 en 2030. El Plan focaliza su acción en áreas de trabajo como son la movilidad, el transporte, la energía, la gestión y el tratamiento de residuos, el agua, el consumo responsable, la agricultura ecológica y la concienciación y educación ambiental.
“Numerosas iniciativas convierten Rivas en un municipio sensibilizado con las energías renovables; además, en un momento en que se ha demostrado que el modelo económico, sostenido en el ladrillo y la especulación, no ha funcionado y ha sumido al sistema en una profunda crisis económica, es hora de concebir una nueva vía productiva basada en fuentes de energía no contaminantes e ilimitadas”, defiende Fausto Fernández. Desde una perspectiva medioambiental, el edil subraya, además, el elevado impacto medioambiental que acarrea la extracción de combustibles fósiles, y recuerda que estos recursos son limitados a corto o medio plazo.