Organizaciones ecologistas piden evitar las aglomeraciones en el medio natural durante el desconfinamiento

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Creen que la desescalada en el medio natural debe conciliar el esparcimiento con la seguridad y la conservación.

Las organizaciones Ecologistas en Acción, GRAMA, Asociación Ecologista del Jarama El Soto, ARBA y Jarama Vivo han solicitado a la Consejera de Medio Ambiente la creación de un grupo de trabajo para planificar y gestionar la desescalada en el medio natural. Estos colectivos temen que se produzcan aglomeraciones que incrementen el riesgo de contagio de la COVID-19, al tiempo que se masifique y degrade el medio natural.

Para estas organziaciones, un reto importante al que se enfrenta la gestión del medio natural en la Comunidad de Madrid es conciliar la desescalada con las medidas de seguridad para evitar contagios de la COVID-19, el esparcimiento de la población y la conservanción. Según el Plan de transición para la vuelta a la actividad cotidiana con las máximas garantías de seguridad, en las fases I, II y III se podrán realizar actividades recreativas y deportivas en la naturaleza. Los ecologistas temen que las limitaciones de movilidad para salir de la provincia puedan provocar que buena parte de la población «se concentre en las zonas más atractivas, de más fácil acceso y con presencia de agua, especialmente en la Sierra de Guadarrama, la Sierra Oeste y la Sierra Norte».

en este sentido, las organziaciones explican que «Las imágenes de años anteriores de multitudes de personas y atascos en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, el valle de la Fuenfría en Cercedilla, La Pedriza en Manzanares El Real, Las Presillas en Rascafría, el Pontón de la Oliva en Patones o el entorno del río Alberche y del embalse de San Juan en los municipios de Aldea del Fresno, Pelayos de la Presa y San Martín de Valdeiglesias, deben alertar a la Consejería de Medio Ambiente a tomar medidas concretas para evitar aglomeraciones, tanto en las fases de desescalada, como una vez superadas».

Además, añaden, «es importante tener en cuenta el informe del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) sobre la transmisión del SARS-Cov-2 en el que considera el baño en ríos como el más desaconsejable por la posible carga viral».

Por ello, las organizaciones ecologistas madrileñas, Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid, GRAMA, la Asociación Ecologista del Jarama El Soto, ARBA y Jarama Vivo, han solicitado a la Consejera de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Sostenibilidad, Paloma Martín y al Viceconsejero Mariano González, la creación de un grupo de trabajo para planificar y gestionar la desescalada y la posdesescalada en el medio natural. Estos grupos de trabajo, con agentes sociales, ya están funcionando en otros sectores como educación y actividades económicas.

Los colectivos proponen que este grupo de trabajo esté formado por representantes de estas organizaciones y las personas que gestionan el territorio en la región (norte, sur, este y oeste, espacios protegidos, vías pecuarias), con el suficiente conocimiento práctico de la problemática y de las actividades y zonas más conflictivas y propensas a sufrir aglomeraciones.

«La pandemia no se ha superado y una inadecuada gestión de la actividad, del distanciamieto social y de la movilidad, en el medio natural, puede ocasionar un retroceso en la lucha contra la enfermedad». Por ello, Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid, GRAMA, la Asociación Ecologista del Jarama El Soto, ARBA y Jarama Vivo, consideran esencial «regular los aparcamientos en el medio natural, el turismo activo y de naturaleza, la práctica deportiva y suspender el baño en todas las aguas naturales».