El ilusionista castellonés, subcampeón del mundo en su género, trae al auditorio Pilar Bardem su espectáculo “Conjuro” para público familiar.
VIERNES 4 ENERO / 18.00. Auditorio Pilar Bardem. Hasta 12 años: 12 euros / + de 13 años: 15 euros.
Venta: web entradas.rivasciudad.es y taquilla (jueves y viernes, de 18.00 a 20.00, y días con función una hora antes).
Salvador Vicent Martínez en la vida real, el mago Yunke en la profesional, hechiza a Rivas con su “Conjuro” el próximo viernes dia 4 de enero a partir de las 18:00h. Este ilusionista Castellonés [Vilavella (Villavieja en español)] le cortó la cabeza al cantante Dani Martín en el programa ‘El hormiguero’. También ha actuado para otros espacios televisivos como ‘Gran hermano’, ‘Nada x aquí’, ‘Con un par de bromas’ o ‘Por arte de magia’, y promete hechizar a la población de Rivas con su espectáculo, ochenta minutos de ilusionismo ideado por quien en su día fuera proclamado subcampeón del mundo de magia y ganara el Óscar del género.
‘Conjuro’ reúne, según el dosier informativo que lo describe, «desde números con mucha fuerza y espectacularidad hasta tiernos juegos que harán las delicias del público». Incertidumbre, tensión, incredulidad y fascinación componen el caldo de esta poza mágica con el que Yunke hechiza al espectador.
Yunke se ha forjado su prestigio año tras año, en 2013 participó en la ‘Gala de Nochevieja’ de TVE, con Juan y Medio y Eva González, o el ‘Especial de Nochebuena’ de la cadena pública con Pablo Alborán, en 2016 se hace con el Premio Mundial de la Magia Oráculo de Oro. En 2015 también se le vio en el concurso televisivo de cocina ‘Masterchef júnior’, además de llevar su espectáculo ‘Enciende tu Navidad’ a la plaza Mayor de Madrid.
Además, colecciona reconocimientos muy reales, como la mención de honor de la familia principesca de Móncao. Lo de Yunke es un mote de la infancia, en honor a su abuelo herrero.
El periodista Joel Iglesias, de ‘El Diario Vasco’, le preguntó en una entrevista si hoy en día aún se consigue sorprender a la gente, respondió: »Realmente lo que menos importa es la trampa o el secreto en sí. Lo que es interesante es sentir emociones, y con la magia es muy fácil porque se realizan trucos que la gente no comprende cómo funcionan. Creo que todo el mundo que ve un efecto se sorprende, así que, en ese sentido, no creo que sea difícil».
Y a la pregunta de si la magia vive un buen momento, golpeaba con tino: «Antes se veía precisamente más como una cosa de niños, pero poco a poco ha ido cambiando. Ahora la magia llena teatros y otros recintos. Es algo que en el extranjero ya ocurría con anterioridad. Hay países en los que siempre ha estado muy valorada».