Es curiosa la elección de los nombres de las calles. Ponerles nombre es un proceso más complejo de lo que parece, porque dar un nombre es dar una identidad. Los nombres de las calles cumplen también esta función en la sociedad, identifican el lugar donde vives, este lugar al que llamamos hogar. El nombre de una calle es algo que permanece en una persona, pues nunca olvidará la calle donde vivió. Los nombres de las calles de las ciudades pueden adquirir esta peculiaridad de lo eterno. No obstante, cabe decir que en algunas ocasiones simplemente es un nombre y lo eterno se convierte en olvido. ¿Alguna vez te preguntas quién esa persona que da nombre a tu calle?

En el municipio de Rivas Vaciamadrid, muchas vías llevan el nombre de escritoras, novelistas o periodistas que tuvieron una gran aportación social y literaria a nuestra historia. Esta es la oportunidad de conocer a la mujer que puede que dé nombre a tu calle, convirtiéndola en algo con esencia propia y eterna.

Sorteando las dificultades que en su época se oponían al acceso de las mujeres a la universidad, Concepción Arenal estudió en Madrid derecho, sociología, historia, filosofía e idiomas (teniendo incluso que acudir a clase disfrazada de hombre).

Fue experta en Derecho, pensadora, periodista, poeta y autora dramática española encuadrada en el realismo literario y pionera en el feminismo español. Defendió a través de sus publicaciones la labor llevada a cabo por las comunidades religiosas en España. En la obra de Arenal se denuncia la situación de las cárceles de hombres y mujeres, hay una crítica social del momento dado la situación de miseria en las casas de salud y por supuesto la condición de ser mujer en el siglo XIX.

Su primera obra sobre los derechos de la mujer es La mujer del porvenir (1869) en la que critica las teorías que defendían la inferioridad de las mujeres basada en razones biológicas, como ya se venía haciendo desde la Querella de las Mujeres del siglo XV. Busca defender, como hacía años antes Mary Wollstonecraft, el acceso de la mujer a la vida pública a través de unos niveles educativos no definitorios, sino más amplios.

Nace en Valladolid en 1898, en el seno de una familia liberal que le permitió tener una amplia cultura literaria y una gran autonomía de pensamiento, algo poco frecuente en la época. Ingresó en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando, con la intención de ser escultora participó en la Exposición Nacional aunque esta materia la abandonaría pocos años después. Desde 1918 que deja la escultura, comienza a codearse con intelectuales como Valle-Inclán en el Ateneo de Madrid (centro de la cultura española) y escribe en la revista de vanguardias Ultra, tablando amistad con Juan Ramón Jiménez, Miguel de Unamuno o Ortega y Gasset. Posteriormente comienza a colaborar en el 27 en la Revista de Occidente, con relatos como “Juego de las dos esquinas”, del 29. En 1930 publica su primera novela, Estación. Ida y Vuelta.

Al principio la guerra permanecerá en Madrid, colaborando en publicaciones literarias y trabajando como enfermera en la contienda. No obstante, acabará cruzando la frontera francesa acabará exiliada junto a su marido y su hijo en Brasil, con una estancia en Buenos Aires, ciudad le dio muchos disgustos a Chacel, pero también fue la ciudad donde acuñó la que se considera su mejor obra literaria La sinrazón, 1960.

⇒ El diario la Vanguardia afirma que Chacel, “a pesar de haber sido galardonada con el Premio de la Crítica (1976), el Premio Nacional de las Letras (1987), el Premio Castilla y León de las Letras (1990), entre otros, Chacel siempre se quejó por no recibir el premio Cervantes”.

María Zambrano Alarcón nace en Vélez, Málaga, el 22 de abril de 1904. Esta gran autora estudió Filosofía en Madrid asistiendo a clases de Ortega y Gasset entre otros, participando a la vez en movimientos estudiantiles y en periódicos. Esta primera etapa fue muy política, siendo profesora auxiliar de la Cátedra de Metafísica de la Universidad Central. En Madrid entabló amistad con autores de la Generación del 27, aquellos literatos que pedían un país más moderno a través de la cultura (entre otras muchas cosas). Hablamos de Luis Cernuda, Miguel Hernández y Jorge Guillén, entre otros. Participó activamente durante la Guerra Civil con el bando republicano, hasta el 39 que cruza la frontera francesa hacia el exilio, instaurándose finalmente en México dónde publica Pensamiento y poesía en la vida española y Filosofía y poesía. Finalmente, vivirá en el exilio donde continuará con su extensa obra que busca el compromiso cívico y el pensamiento poético.

En 1981 regresará a España. Ya anciana, recibió los dos máximos galardones literarios concedidos en España: el Premio Príncipe de Asturias en 1981, y el Premio Cervantes en 1988. Morirá en Madrid el 6 de febrero de 1991.

⇒ Cabe destacar en la filosofía de Zambrano su “razón poética”, muy distinta a la razón vital de Ortega o a la razón pura de Kant. Esta razón va más allá, dentro de la búsqueda del “yo” y de la persona, adquiere un carácter más metafísico, buscando penetrar en el alma para descubrir lo sagrado, que se expresa de manera poética.

Con tan solo dieciséis añitos comienza a cultivar el género de la poesía, publicando sus primeros poemas en diferentes periódicos de la Habana. En 1927 se doctora en Derecho Civil y ejerce como abogada, paralelamente dedicándose también a la escritura.

Comienza su novela Jardín – cuya redacción le lleva siete años – en 1928, y al año siguiente escribe Carta de amor al Rey Tut-Ank-Amen tras un largo viaje por Turquía, Túnez, Siria, Libia, Palestina y Egipto. En el año 37 escribe su poema Canto a la mujer estéril en la Revista Bimestre Cubana.

En 1951 es elegida miembro de la Academia Nacional de Artes y Letras de Cuba, y ese mismo año es nombrada Hija Adoptiva por el Ayuntamiento de Puerto de la Cruz (Canarias). Ingresa en la Academia Cubana de la Lengua en 1959 y, nueve años más tarde, en la Real Academia Española. Fallece el 27 de abril de 1997.

Fue doctora honoris causa por la Universidad de León y miembro honorario de la Hispanic Society of America y de la American Association of Teachers of Spanish and Portuguese. Además, fue elegida como miembro de la Real Academia Española en 1996, ocupando el asiento K de Carmen Conde por lo que fue la tercera mujer en ingresar en 300 años. En 1998 toma posesión de su asiento con el discurso En el bosque.

⇒ Pincha en este enlace para escuchar el Discurso de Ana María Matute en la web play radio de RTVE

En el año 1948 inicia su obra literaria con Los Abel. Su proyección incluye novelas, relatos cortos y cuentos infantiles, el primero de los cuales escribió a los cinco años. Formó parte de la generación de los “jóvenes asombrados”, nombre que ella misma acuñaría a los autores que reflejan la situación de la Guerra Civil en su infancia, entre ellos Jaime Gil de Biedma. Para la escritora, la guerra y la posguerra cambiaron su vida «nadie me había dicho que la vida era así» (cita de El País de la escritora).

Los hijos muertos, es una novela en la que Matute trata la cuestión de clase social y la lucha entre las dos Españas. En la obra se trata lo colectivo, la sociedad inmersa en una gran injusticia, pero a su vez comida por el odio que se ensañará en la posguerra de vencedores y vencidos.

Escribió novelas, cuentos, reportajes y artículos periodísticos por los que recibió diversos premios. Comprometida con el feminismo y en la lucha contra el franquismo, militó en diversas organizaciones por la defensa de la mujer. Estudió Arte Dramático en la escuela Adrià Gual, donde conoció, entre otros, a la escritora María Aurèlia Campmany con la que entabló una profunda amistad.

La cuestión histórica en Roig es clave y muy destacada como se aprecia en su ensayo Noche y niebla: Los catalanes en los campos nazis (Els catalans als camps nazis, 1977), un “riguroso libro documental galardonado con el Premio de la Crítica Serra d’Or y que aportó datos inéditos sobre el Holocausto”.

⇒ En el artículo de El Mundo, Montserrat Roig y su cruzada contra el olvido, explica que este año fue decisivo para la autora con este ensayo consiguió darse a conocer en todo el mundo, ya que este ensayo fue un hito en la memoria histórica y Roig una de las pioneras en esta materia. “Investigó, recopiló, reconstruyó y plasmó las historias de los republicanos catalanes que, abandonados a su suerte en el exilio por el gobierno español, murieron o sobrevivieron a los campos nazis”.

Roig fue también un personaje clave en el femenismo de los años 70 en España. Proclamándose feminista, reflexiona tanto en su obra periodística y ensayista como en la ficción, consciente de la necesidad de acercar la teoría liberadora que propone el movimiento a las necesidades de miles de mujeres anónimas silenciadas por la historia oficial.

Almudena Grandes es una de las mejores literatas de nuestro siglo, la escritora que mostró y dejó para la eternidad escrito la historia de los derrotados de la dictadura, dándoles la eternidad que solamente la escritura da. Una de las historiadoras que actualmente se involucró más en la cuestión de la memoria histórica en España, ambienta sus obras en el siglo XX sobre todo en la vida cotidiana y como el cambio de siglo afecta a la misma. Como novela histórica, su tema central es la Guerra Civil española.

Su primera novela, Las edades de Lulú (1989), obtiene un gran éxito de crítica y público y es traducida a más de 20 idiomas. En El corazón helado (2007) presenta el establecimiento de varias dinámicas de poder de la España contemporánea. Su obra Malena es un nombre de tango (1994) está ambientada en la España de la transición y a través del paso del tiempo de la vida muestra la sociedad del momento desde los ojos de Malena Fernández.

La mayoría de las novelas de Grandes están protagonizadas por mujeres. Otro texto que destaca de la larga trayectoria de la novelista es El corazón helado, considerada por la propia autora como su novela más ambiciosa, en ella la escritora muestra una de las épocas más oscuras de la historia del país, una novela con la que muestra la época de la posguerra, examinando la Guerra Civil y sus repercusiones e influencias actuales. Cuenta la historia de los exiliados republicanos y la inadaptación de sus generaciones posteriores.

El compromiso político de Almudena Grandes era claro, su compromiso para con la recuperación de la memoria histórica aún mayor conectando con aquella generación de plata que la guerra engulló. Una gran escritora que falleció el pasado 2021 debido a un cáncer que ha dejado una gran obra literaria.

Fuentes utilizadas para la información de las vidas de las escritoras: