El pasado martes 26 de junio se realizó en Rivas una nueva edición de la Fiesta de la Educación Pública, un evento que lleva camino de adquirir la solera de evento tradicional. Hubo algo menos de participación que en anteriores ediciones, probablemente debido al enorme calor reinante, que obligó a las y los asistentes a guarecerse del sol y a refrigerarse constantemente rociándose agua o abanicándose a toda pastilla. La Marea Verde fue protagonista de la Fiesta.
Se echó de menos, precisamente por ello, el cañón de espuma usado en años anteriores, si bien las condiciones de sequía y de crisis parecían aconsejar la renuncia a este tipo de elementos. No faltó, en cambio, la Marea Verde, que en este caso fue verdaderamente una marea, ya que las camisetas verdes de apoyo a la Educación Pública no podían encontrar mejor lugar que esta Fiesta para expresarse.