La Guardia Civil ha detenido a diez personas en Rivas por cultivar marihuana, por lo que se les implica en un presunto delito contra la salud pública y otro de defraudación de fluido eléctrico.
Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Área de Investigación de Rivas-Vaciamadrid han descubierto, durante la operación, dos laboratorios de cultivo de marihuana en pleno funcionamiento, siendo imputado además a uno de los detenidos un delito continuado contra la seguridad vial.
La investigación comenzó a raíz de una serie de notificaciones de los vecinos del chalet, que manifestaron a los agentes el fuerte olor a marihuana y el ruido constante que había en una de las viviendas de la localidad, según una nota de prensa de la Guardia Civil.
A partir de este momento se establecieron “vigilancias discretas” en las inmediaciones, con la finalidad de constatar la existencia de alguna plantación ilegal, así como identificar a la personas o personas que pudieran estar realizando alguna actividad ilícita, han agregado.
Fruto de las investigaciones, se logró averiguar que el chalet, que estaba alquilado, era frecuentado por varios varones y que a menudo acudían varias personas para adquirir sustancias estupefacientes.
Los agentes también pudieron comprobar el ruido proveniente del interior, correspondiente al continuo funcionamiento de los aparatos de aire acondicionado, y la existencia de un enganche ilegal al suministro eléctrico.
Por ese motivo, los agentes solicitaron el correspondiente auto judicial para realizar una entrada y registro en la vivienda, donde se localizaron dos laboratorios perfectamente acondicionados, además de un furgoneta completamente cargada de plantas dispuesta para salir del domicilio.
Este hallazgo ha dado lugar a la detención de los diez integrantes del grupo, nueve hombres y una mujer con edades comprendidas entre los 29 y 33 años. Varios de los detenidos poseían antecedentes por delito de tráfico de drogas. También se han intervenido seis vehículos, dinero en efectivo y enseres para el cultivo de las plantas.
Se han intervenido además un total de 791 plantas de marihuana de gran tamaño, que pesaban más de 45 kilogramos, así como hachís y otras sustancias que están pendientes de análisis, según han añadido desde la Benemérita.
Según la documentación hallada, se deduce que el fin de la droga incautada sería para su distribución en clubs de fumadores de cannabis, dada la especificación en macetas de las distintas variedades y subvariedades de dichas plantas de cannabis, han apostillado desde la Guardia Civil.