El Ministerio del Interior cifra en 2.279 los casos de delitos ‘convencionales’ registrados en el segundo trimestre de 2023, frente a los 2.470 del mismo periodo de 2022. Las estafas informáticas suben desde las 416 de 2022 hasta las 653 de este año.
El balance de criminalidad que publica periódicamente el Ministerio del Interior asigna a Rivas Vaciamadrid un aumento global de un 1,6% en el segundo trimestre de 2023, respecto al mismo periodo de 2022. Sin embargo, este dato se estructura de manera que son los delitos cibernéticos, en particular las estafas informáticas, las que hacen subir el número de delitos globales, mientras que lo que el Ministerio denomina ‘criminalidad convencional’ desciende notablemente: un 7,7%.
Criminalidad convencional
El balance registra, por un lado, apartados como los homicidios, las riñas y lesiones, los delitos contra la libertad sexual, los robos con violencia o con fuerza, los hurtos, la sustracción de vehículos o el tráfico de drogas, englobando a todos ellos bajo el epígrafe de «Criminalidad convencional».
En este apartado, que es el que registra un notable descenso respecto al pasado año, destacan los aumentos de delitos registrados en Robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones (de 117 en 2022 a 186 en 2023, un 59% más); y hurtos (950-1.070, +12,6%). Los delitos que crecen se compensan, sobre todo, con la gran bajada en otras clases de delitos convencionales, que descienden desde los 1.226 de 2022 hasta los 860 de 2023.
Cibercriminalidad
En este apartado es donde el número de delitos registrados aumenta notablemente, haciendo subir el índice global de criminalidad en Rivas.
Aquí el Ministerio del Interior incluye las infracciones penales cometidas en o por medios cibernéticos. Distingue entre dos tipos: las estafas informáticas y otros ‘ciberdelitos’. Mientras que los últimos descienden levemente (de 39 a 36, un 7,7%), las primeras aumentan un 63,7%, desde las 377 de 2022 hasta las 617 de 2023.