La Comunidad de Madrid inicia la XIII Semana de la Prevención de incendios en el hogar en la que se incide en el uso de los detectores de humo como elemento esencial para salvar vidas frente a incendios. Madrid es la segunda comunidad autónoma con menor número de víctimas de incendio por millón de habitantes.
La Comunidad de Madrid ha puesto en marcha la XIII edición de la Semana de la Prevención de incendios en el hogar, un programa de formación y sensibilización para divulgar entre los madrileños conocimientos básicos de prevención y autoprotección.
Las actividades comenzaban ayer lunes 19 de noviembre en el Parque de Bomberos de Parla, donde cerca de 300 escolares de los colegios públicos Julián Besteiro y Miguel Hernández, junto con el vicepresidente de la Comunidad y consejero de presidencia, Pedro Rollán, han participado en una clase de autoprotección de incendios y en talleres de prevención, primeros auxilios y seguridad vial. “Es importante que los más pequeños adquieran estos conocimientos y que, a su vez, se conviertan en ‘educadores’ de su entorno familiar”, ha explicado Rollán. Además, se realizarán sendos simulacros de evacuación en el Hospital Infanta Cristina (miércoles, 21 de noviembre) y en la Residencia de Mayores Ilunion, el próximo jueves.
La Semana de Prevención de Incendios es una iniciativa promovida por Fundación MAPFRE y la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos (APTB). En la Comunidad de Madrid se lleva a cabo con la participación fundamental de los profesionales de la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112, especialmente del Cuerpo de Bomberos.
Este programa de prevención de incendios se complementará con la campaña ‘Este invierno protege tu hogar’, que llevará a más de 200 soportes publicitarios de Metro de Madrid los principales consejos de prevención de incendios en el hogar, junto a unos videoconsejos que se emitirán en Canal Metro.
DETECTORES DE HUMO EN LOS HOGARES
En el marco de estas jornadas, desde la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 se incide, además, en la importancia de instalar detectores de humo en las viviendas. Según los datos del último Estudio de Víctimas de Incendios elaborado por la ATPB, 7 de cada 10 muertes provocadas por un incendio se deben a la inhalación de humos y en incendios que se producen en el propio hogar.
En ese sentido, el vicepresidente regional ha destacado el compromiso de la Comunidad de Madrid, a través de la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112, tanto con la prevención como con la formación sobre cómo actuar en caso de emergencia. Ambas cuestiones contribuyen, sin duda, a que la Comunidad de Madrid sea la segunda región –solo por detrás de Asturias- en la que se han registrado menos víctimas mortales por incendio y millón de habitantes en 2017.
Estos datos, incluidos en un estudio que la Fundación MAPFRE va a presentar próximamente, indican que la media en España es de 4,54 fallecidos/millón de habitantes, mientras que en la región desciende a 1,67 víctimas mortales/millón de habitantes.
CONSEJOS PARA EVITAR INCENDIOS EN LAS VIVIENDAS
Rollán ha recordado, además, las principales recomendaciones para evitar que se produzcan incendios en las viviendas, insistiendo en la ventaja que supone contar con detectores de humo que nos permitirán alertar lo antes posible al 112:
- Es importante prestar atención a estufas, chimeneas y calderas, que deben estar en perfecto estado de revisión y limpieza, y no hay que obstaculizar las rejillas de ventilación, porque eso puede provocar la acumulación de monóxido de carbono.
- No se deben sobrecargar enchufes y, con la llegada de las fiestas navideñas, hay que extremar la precaución respecto a velas y otros elementos de decoración que van conectados a la red eléctrica.
- En caso de incendio, lo primero que hay que hacer es comprobar si el fuego afecta a una planta superior o inferior a la que nos encontramos.
- Si ocurre en una planta superior, debemos bajar a pie –siempre y cuando no haya humo en la escalera- y salir a la calle; si el incendio está en una planta inferior, hay que recordar que el humo tiende a subir hacia arriba y que, por tanto, lo mejor es permanecer donde nos encontramos, colocar toallas o ropa húmeda bajo la puerta para evitar la entrada del humo y acercarnos a una ventana para que nos puedan ver y rescatar.