Alumnado, familias y profesorado del centro educativo Hipatia organizan el próximo 25 de noviembre una serie de actividades cuyo fin es poner de manifiesto la lucha contra las violencias machistas. La comunidad educativa repartirá chapas ese día con el lema «Hipatia libre de violencias machistas» y llenarán la jornada con diversas iniciativas, desde la confección de un iceberg gigante que represente las proporciones entre violencias visibles y otras más ocultas; hasta el cubrimiento de las ventanas de algunas aulas con ‘lágrimas negras’, una por cada mujer víctima de violencia machista en 2019.
Una nota explicaba el pasado viernes que el Grupo de Género del centro realizará un manifiesto con una propuesta al conjunto de la comunidad educativa del mismo para que el 25 de noviembre acudan al colegio vestidos de negro «para visibilizar la violencia que se ejerce contra las mujeres». El grupo repartirá chapas con el mensaje «Hipatia libre de violencias machistas» en la entrada de los diferentes edificios que componen el complejo educativo.
Por otra parte, la propuesta del Grupo de Género incluye la colocación de ‘lágrimas negras’ en las ventanas del comedor, una por cada una de las víctimas de violencia machista en 2019; y piden a las monitoras de ese servicio lleve un letrero en su ropa con la frase «Nos queremos vivas».
Desde Infantil hasta Bachillerato
Las propuestas incluyen a todas las edades del alumnado. Para Infantil y Primaria se trasladará a las familias y al equipo docente el enlace del cuento “Yo voy conmigo” y se enviará como trabajo para casa junto con una ficha para «favorecer la reflexión con las familias». En ESO y Bachillerato se realizará un iceber gigante que se ubicará en el hall y que «representará los distintos tipos de violencias machistas», desde los menos visibles, que se dispondrán en la base, hasta los más visibles, que se colocarán en la cúspide. Esta iniciativa va acompañada de un taller en el que se trabajarán los distintos tipos de violencia hacia la mujer (violencia sexual, violencia física, violencia económica, violencia simbólica, violencia institucional y violencia psicológica) por la técnica cooperativa del rompecabezas.
De forma general, además, se guardará un minuto de silencio y 51 alumnas realizarán una performance representando a las 51 mujeres asesinadas este año. Cada una de ellas llevará colgado un cartel con el nombre de la mujer asesinada, su edad, y el número que ocupa en el orden de asesinatos. «La performance acabará con ellas en el suelo, y alumnos cogiendo los carteles de sus cuellos que irán posteriormente desfilando hacia el iceberg, donde colgarán cuerdas con pinzas. Se pondrán los carteles en las pinzas y se subirán en forma de polea, para que acaben los asesinatos en la cúspide del iceberg», explica la nota del centro educativo.
Además, algunos alumnos y alumnas han grabado una serie de cortos sobre violencia machista que expondrán y explicarán al alumnado de otras etapas.