Finaliza el primer curso del Proyecto perrutis, que promueve el ocio saludable frente a las drogas

1099
Participantes en la clausura del curso (Foto: Kike Ayala)
Participantes en la clausura del curso (Foto: Kike Ayala)

El sábado 10 de junio se celebró en la sede ripense de Rivas Puede la clausura del presente curso del Proyecto Perrutis, una actividad que promueve el ocio saludable y que está enfocada a la prevención del consumo de alcohol y drogas en jóvenes y menores, promoviendo el adiestramiento canino.

La iniciativa, de carácter gratuito, busca “enganchar” a los jóvenes y que puedan ver que hay “muchas más cosas en la vida”, por encima del alcohol o las drogas, que les van a aportar “muchísima más satisfacción”, según explicaron en declaraciones a Rivas Actual los responsables del proyecto.

La charla del pasado sábado fue  impartida por el Policía local David Valera, y exmiembro de la recientemente clausurada brigada canina, y Emilio Ortiz, terapeuta titulado en Proyecto Hombre con una dilatada carrera  en prevención y rehabilitación en drogodependencias y toxicomanías.

También acudieron padres y jóvenes participantes en el proyecto (este año han sido 35) que asistieron al debate con los expertos, en el que se abordaron temas como en qué pueden invertir el tiempo libre los jóvenes durante el verano.

Los padres explicaron, en declaraciones a Rivas Actual, que conocieron el proyecto a raíz del área de servicios sociales, que recomendaron la actividad a chavales que habían tenido problemas con las drogas y que debían mantenerse ocupados; y a través de los centros educativos, como el Instituto Duque de Rivas.

Algunos de los padres participantes apuntaron que sus hijos no tienen problemas con las drogas, pero veían “interesante” que los estén en contacto con esta actividad, aprendan a adiestrar a los perros y “vea la realidad de la calle y sus peligros, especialmente en lo referente a la droga”.

“Cuando los jóvenes consumen no piensan en las consecuencias, creen que no pasa nada porque lo hace más gente”, apuntó otra de las madres, que ensalzó esta actividad que permite que los menores vean que se pueden divertir sin consumir y hayan tenido “cambios radicales” y positivos en su conducta.

Con todo, la respuesta ha sido positiva por parte de los participantes, que han asegurado que el mes de septiembre volverán a participar en el curso para conocer otras formas de ocio lejos de las drogas.

La historia del Proyecto Perrutis

La iniciativa arrancó en octubre de 2016, a demanda de muchos padres que, en algún momento, habían sido alertados de que sus hijos menores estaban haciendo botellón o consumiendo alguna sustancia estupefaciente.

Inicialmente se ofertó en pruebas en Rivas, después de que el plan fuera descartado en primera instancia para realizarse de forma interna entre los agentes. El objetivo era poder trasladar la actividad a aquellos municipios donde existan unidades caninas, de forma que se extienda esta oportunidad de ofrecer una alternativa de ocio saludable a los menores que consumen alcohol y drogas.

“Las Administraciones están obligadas por Ley a ofrecer una alternativa a los menores sancionados por consumo de alcohol o drogas, pudiendo cambiar la sanción económica por la realización del curso y apoyo terapéutico profesional”, han explicado.

En concreto, el primer equipo fue formado por el instructor de Guías Caninos de la unidad canina, David Valera Fraile (que es el coordinador del proyecto), y su compañero y guía canino, Víctor Sánchez Santos. Posteriormente se unieron de forma altruista el “adiestrador en positivo” de la localidad, Carlos Magariños, y el terapeuta Emilio Ortiz Celada.

En qué consiste el proyecto

Los participantes participan en un curso de adiestramiento con los chavales y sus perros, aprendiendo sobre tenencia responsable de mascotas. Así, a través de los animales, aprenden valores como la responsabilidad, el respeto, el trabajo y la constancia, además de la empatía con la policía.

También participan en charlas con los chavales, sus padres y el terapeuta sobre prevención del consumo de alcohol y drogas. Al mismo tiempo reciben herramientas para detectar estas conductas y paliarlas, al igual de contactos con otras instituciones y profesionales si se detectan problemas graves o en estado muy avanzado.

Nuevo curso en septiembre

El proyecto se retomará en el próximo mes de septiembre, cuando los organizadores esperan poder mejorar su oferta y el material, ya que han recibido una subvención enmarcada en el “Proyecto avanza” de Rivas Puede.