Plena Inclusión Madrid se manifestó ayer en ese sentido y la pasada semana lo hizo FAMMA-Cocemfe. Ambas entidades reclaman recursos para quienes atienden a personas con discapacidad de distinto tipo, bien sea en centros o a domicilio, así como protocolos que garanticen una correcta atención sin riesgo para el personal de atención y para las personas atendidas.
Plena Inclusión Madrid emitió ayer un comunicado en el que su presidente, Mariano Casado, reconoce que «Hay cientos de personas en nuestras residencias y viviendas que están siendo cuidadas de manera ejemplar por los profesionales de nuestras entidades, pero es preciso que se les dote de material de protección y de profesionales sanitarios para garantizar su salud».
En similares términos se manifestaba la semana pasada FAMMA-Cocemfe, cuyo presidente, Javier Font, reconoció el avance que había supuesto la implementación de un protocolo para cuidadores de personas con discapacidad, pero recriminó a las empresas que suministran esos cuidados que «no hayan implementado antes y por su propia iniciativa cuestiones tan elementales» como dotar a su personal de equipos de protección básicos que dificulten el contagio hacia las personas a las que atienden y hacía sí mismos.
Servicio esencial
El comunicado de Plena Inclusión Madrid da un paso más allá y reclama la consideración del trabajo del personal de Servicios Sociales como «un servicio esencial en la gestión de la crisis sanitaria del COVID-19», en línea con lo planteado el viernes por el Secretario de Estado de Servicios Sociales, Nacho Álvarez.
El presidente de Plena Inclusión recordó además que «muchas personas con discapacidad intelectual o del desarrollo necesitan apoyos personales, permanentes e imprescindibles en muchas ocasiones para que comprendan lo que ocurre o faciliten la comunicación, por lo que es necesario que los protocolos sanitarios se adapten para dar respuesta a estas necesidades».
Por otra parte, recordó también que la discapacidad «no puede ser en ningún caso motivo de discriminación» y en ese sentido solicitó a Salud Pública que se «mantenga alerta y vigilante ante posibles situaciones de exclusión que puedan sufrir pacientes ingresados con COVID-19».
El comunicado menciona que «En las últimas horas [de ayer, sábado], las redes sociales se han hecho eco de un posible caso de discriminación a un hombre con síndrome de Down al que se le negaba acceso a la UCI, aunque el paciente, tal y como confirman a Plena Inclusión Madrid sus familiares, ha sido trasladado en la mañana de hoy a esta unidad».