Elena Muñoz ha accedido recientemente al cargo de concejala de Participación Ciudadana, sustituyendo a su compañero de partido Alberto Cabeza. La edil es nueva en esta responsabilidad, pero no en las tareas de Gobierno, en el que ha participado, siempre en las listas socialistas, en varias legislaturas anteriores.

Elena Muñoz responde en esta entrevista a las preguntas de Rivas Actual sobre sus planes para su nueva responsabilidad.

Rivas Actual: Acabas de acceder a la responsabilidad de dirigir la concejalía de Participación Ciudadana, que hasta la fecha tenía Alberto Cabeza. ¿A qué se debe el cambio?

Elena Muñoz: Las concejalías de Participación Ciudadana y Organización y Función Pública están delegadas en concejales del Partido Socialista, según el acuerdo de gobierno  alcanzado al inicio del mandato. Mi incorporación a Participación Ciudadanda se debe, sobre todo, a mi perfil vecinal.

He participado en distintos foros, asociaciones y consejos sectoriales ciudadanos. He sido
presidenta del Consejo Económico y Social de Rivas, consejera ciudadana de la EMV,
consejera en el consejo municipal de Cultura y representante de este en el Consejo de Ciudad.

Desde el punto de vista político, en la anterior legislatura trabajé también en el área de
cohesión social y desde el Grupo Municipal Socialista entendimos que este cambio sería
interesante. Aprovecho para agradecer a mi compañero Alberto Cabeza el trabajo realizado, que seguro seguirá siendo igual de eficaz en sus nuevas competencias.

Elena Muñoz posa ante la entrada a la Casa de Asociaciones del barrio de Covibar, sede de la concejalía (Foto: Kike Ayala / Rivas Actual)

R.A.: ¿Qué aspectos consideras que requieren la atención más inmediata en la concejalía?

E.M.: La verdad es que me he encontrado una concejalía con un gran equipo humano y que funciona como un reloj. Esta ciudad tiene un gran espíritu democrático y la participación requiere de mucha atención. Es muy importante la gestión de los Presupuestos Participativos, el impulso de los consejos sectoriales, y sobre todo, la pedagogía sobre la importancia que tiene la propia participación ciudadana, que es un elemento transversal a todas las áreas.

Tenemos que ser conscientes de que participar a través de grupos organizados, con foros de debate, de conclusiones, de puesta en marcha de iniciativas, es lo que diferencia las políticas progresistas y lo que hace que los vecinos y vecinas sean ciudadanos y  ciudadanas. Frente a este modelo, está el que tiene como único objetivo la gestión de los contribuyentes dentro de un único marco, que es la bajada de impuestos a costa siempre de los servicios públicos.

Foto: Kike Ayala / Rivas Actual

R.A.: ¿La línea de trabajo que seguirás, más allá de esos aspectos, en qué se basará?

E.M.: Sin hablar de una política meramente continuista, creo que en este momento, en el poco tiempo que llevo al frente de la concejalía, conviene señalar que hay ya una línea de trabajo muy clara y fuerte. Bajo mi punto de vista, potenciar los barrios y su participación es fundamental.

Tenemos que tener en cuenta que la división territorial de Rivas en sus tres barrios, Oeste, Centro y Este, nos muestra una idiosincrasia diferente en cada uno de ellos, tanto urbanísticamente como de población, al mismo tiempo que tienen que formar parte de un modelo de ciudad que tiene que ser homogéneo en servicios y espacios públicos. Siempre he creído que la ciudad se hace desde los barrios, y ese es uno de los principales objetivos.

R.A.: Eres ya una experimentada concejala, que has ostentado cargos de gobierno en varias ocasiones, pero en terrenos bastante diferentes, particularmente en el de Desarrollo Económico y Empleo. ¿Cómo abordas personalmente este cambio?

E.M.: Ambas concejalías forman parte de una misma área, que es la de Cohesión Social, por lo que sigo trabajando bajo ese amplio paraguas. Lo mismo que en Desarrollo Económico era importante que tanto las empresas, como el comercio y la generación de empleo sirvieran para hacer ciudad, en Participación Ciudadana tenemos que seguir en esa senda a través del tejido asociativo y de su implicación en la construcción y el mantenimiento de una ciudad de por sí complicada.

En ambas, el factor humano es muy importante, y la experiencia en este caso como vecina y colaboradora en los movimientos sociales, como he señalado anteriormente, me sitúan en una posición muy interesante y motivadora para esta nueva gestión, en colaboración siempre con la ciudadanía.