Las intervenciones incendiarias de la concejala de Vox provocan la respuesta indignada de buena parte del Pleno. El PP insinúa una acusación contra Podemos por promover ataques contra los comerciantes locales.
Segundo Pleno municipal en el que las intervenciones incendiarias de la única concejala de Vox, María de los Ángeles Guardiola, provoca respuestas indignadas de la mayoría de las y los portavoces de los grupos municipales.
Guardiola, sin salir de su repertorio habitual de «chiringuitos» y similares, ha elevado hoy el tono y ha lanzado improperios contra Pablo Iglesias, Podemos y la izquierda en general. Lo mismo le ha dado a la edil ultraderechista si el tema que se abordaba era una moción a favor de la creación de un Pacto por la Sanidad Pública, como si era la reclamación a la Comunidad de Madrid para que cumpla sus competencias en materia de cuidado de vías pecuarias y humedales del Parque Regional del Sureste. O si se proponía adherirse al proyeto ‘Viopet’ del Ministerio de Derechos Sociales, consistente en acoger a animales de compañía en casos en que un maltratador los utilice para acosar a su expareja. O si se hablaba de la propuesta de instar al Gobierno regional para que cumpla con sus competencias en materia de inversión en centros educativos públicos.
Con temas como los citados, la concejala ha incluido en sus intervenciones cuestiones como la supuesta financiación de una fiesta del PCE, la «gracias a Dios» desaparición de la política de Pablo Iglesias, las «mentiras» de Pedro Sánchez, las subvenciones a entidades ciudadanas, una acusación (sin pruebas) de que en el Ayuntamiento se cobran dedicaciones exclusivas por parte de concejales que tienen otros salarios, lo contentos que estarían los habitantes de la Cañada Real si pudieran vivir en los barracones que la Comunidad ha instalado en varios colegios públicos ripenses y, por supuesto, el consabido reparto de «chiringuitos» a diestro y siniestro.
Frente a esta lista de salidas de tema y frente al tono extremadamente bronco de sus intervenciones, se han alzado las voces de la práctica totalidad de los portavoces, que en mayor o menor medida, de forma más directa o más irónica, le han recriminado las mismas. Resultado: un nuevo ambiente de bronca en el Pleno. Como dato a tener en cuenta, el Alcalde, Pedro del Cura, que tiene una larga experiencia en ordenar y conducir los Plenos, ha mostrado explícitamente su desesperación por el alud de intervenciones y las respuestas que generaban éstas, cuando ha reconocido sentirse «con dificultades para ordenar el Pleno».
La derecha, contra Podemos
Más allá del universo ‘chiringuitil’ de la concejala de Vox, otra moción ha suscitado una serie de graves acusaciones por parte del concejal del PP Francisco Gallardo contra la portavoz de Podemos y contra este partido en general.
La propuesta al Pleno en cuestión tenía como asunto «condenar el señalamiento de la plataforma ‘Explotadores de Rivas’ al comercio local de Rivas Vaciamadrid». Gallardo, que ha presentado y defendido la moción, ha elogiado al comercio de Rivas y denostado la práctica seguida por la mencionada plataforma en Instagram, por considerar que se ha convertido en un «ataque al comercio local de Rivas». En su intervención, sin embargo, ha ido más allá y ha insinuado que la responsabilidad de la creación de tal plataforma es de Podemos Rivas. En su segunda intervención sobre la moción, Gallardo ha dicho que «casi todos los que integran» la plataforma ‘Explotadores de Rivas’ «pertenecen a un partido, el partido que regenta nuestra señora Vanessa [Millán]». Tanto la concejala de Vox como el concejal no adscrito Bernardo González (firmante de la moción) se han posicionado en similares términos. La moción estaba firmada también por el otro concejal no adscrito, Antonio Sanz, que no intervino pero que ya hizo pública su afiliación al PP.
La acusación ha desatado una indignada protesta de la portavoz del partido morado, Vanessa Millán, que ha pedido que retirase tales palabras. No ha sido la única que se ha escandalizado al escuchar la acusación. Mientras Gallardo lanzaba esa frase, una voz (aparantemente, la de la concejala de Desarrollo Económico, Elena Muñoz) valoraba: «¡Qué vergüenza!». La vicealcaldesa, Mónica Carazo (que en ese momento dirigía el Pleno debido a la ausencia del Alcalde, que ha tenido que acudir a una estratégica reunión con el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid), ha solventado el asunto pidiendo que se revise, en cuanto ello sea posible, la grabación del Pleno, con vistas a concluir si se ha producido la acusación como tal o no, para, en función de ello, adoptar las medidas pertinentes.
A las acusaciones insinuadas por el portavoz del PP se ha sumado el concejal no adscrito Bernardo González (que en su día fue el promotor de las acusaciones contra un miembro de Podemos atribuyéndole la promoción de la plataforma de Instagram). Francisco Gallardo ha procurado, al igual que González y Guardiola, situar el «debate» en el terreno de la necesidad de que todos los grupos municipales condenasen dicha plataforma y de que expresasen su apoyo al comercio de Rivas. La respuesta de los tres partidos de Gobierno local ha sido similar: el apoyo al comercio local lo viene expresando el Ejecutivo ripense con todas las medidas de apoyo al mismo que se han venido adoptando; y no cabe que una Corporación local condene una iniciativa a fin de cuentas legal llevada a cabo por un grupo de personas del municipio. Además, tanto IU-Equo-Más Madrid como el PSOE y Podemos han valorado que la moción obedecía a un deseo de los proponentes de tener «su minuto de gloria» y a un intento de adquirir notoriedad ante un sector de la población ripense.
No sólo han sido los partidos del Gobierno local los que han mostrado rechazo a la moción. El portavoz de Ciudadanos, Jorge Badorrey, con el tono mesurado que le caracteriza, ha afirmado su apoyo a los comercios pero ha criticado una propuesta que, según ha venido a decir, «intenta que una administración interfiera en asuntos privados entre la ciudadanía, algo que los liberales rechazamos». Tampoco ha valorado positivamente el portavoz de Ciudadanos Rivas el hecho de que la moción llegase tras haberse intentado debatir en el pleno de enero, por la vía de urgencia. Ha considerado, además, que la moción no era relevante para los comerciantes «a los que dice querer defender», porque las propuestas de acuerdo que la propuesta incluía «no suponen ningún elemento que pueda beneficiar» a aquellos.
También contra el PSOE
Cabe destacar también el choque, que ha llegado a adquirir tintes bastante personales, entre Gallardo y la concejala de Desarrollo Económico y Empleo, Elena Muñoz. Gallardo ha utilizado, en la defensa de su moción, una comparación que a la concejala del PSOE le ha resultado escandalosa. Argumentaba el concejal del PP que la práctica seguida por la cuenta ‘Explotadores de Rivas’ era comparable a la seguida por los nazis en la Alemania de la década de 1930, acusando de todo tipo de maldades, de manera anónima y sin fundamento, a los judíos de aquél país.
La edil socialista ha calificado de «barbaridad» y de «escandalosa» tal comparación y ha afeado a Gallardo la utilización del símil porque «usted no ha conocido la barbarie que supuso la persecución de los judíos en la Alemania nazi». Muñoz ha recordado que en aquel caso se producían asesinatos y deportaciones masivas. Gallardo, que no solo no ha retirado la comparación, sino que se ha afirmado en ella, aparentemente ha creído entender que se juzgaba su juventud como causa de desconocimiento, cuando en una intervención posterior se ha dirigido a Elena Muñoz diciéndole: «no suponía que era usted tan mayor como para haber estado en la noche del 38» [la conocida como ‘Noche de los cristales rotos’, en noviembre de 1938, cuando, como consecuencia de una acción planificada por el partido nazi, miles de seguidores del mismo se lanzaron a romper escaparates de locales propiedad de personas judías y a agredir a las mismas]. «Yo no puedo hablar de ello porque soy muy joven y no tengo ni idea», ha apostillado Francisco Gallardo.