La presentación por parte del PP de una enmienda a la totalidad a una moción reclamando la construcción inmediata del cuarto centro, provoca un cruce de intervenciones agresivas entre Gobierno y oposición. La plataforma Rivas con la Sanidad Pública, que tenia una intervención reservada al final del Pleno, estuvo presente durante todo el debate.
PUNTUALIZACIÓN
La portavoz del Grupo Popular, Janette Novo, no hizo, como decíamos erróneamente en la primera versión de esta crónica, referencia alguna en sus intervenciones defendiendo su enmienda, a la persona de Javier Tabarés, que representó a la plataforma Rivas con la Sanidad Pública en la intervención posterior al Pleno. Sí se refirió a la propia plataforma, diciendo que el Gobierno local estaba dando «pábulo a plataformas politizadas que aprovechan esto para luego insultarnos, señalarnos y acosarnos, como nos han hecho en redes sociales, en la que nos llaman chorizos, nos llaman acosadores, nos llaman corruptos».
Unos grupos (los que componen el Gobierno municipal) planteaban, ayer en el Pleno municipal, una moción reclamando a la Comunidad de Madrid la construcción inmediata del cuarto centro de salud para Rivas. Otro (el del Partido Popular) presentaba una enmienda a la totalidad de esa moción. Hasta la fecha, no ha sido habitual que la oposición se posicione abiertamente en contra de mociones que reclaman esta infraestructura, por lo que la enmienda del PP sonó a novedad nada prometedora.
El trámite habitual para tratar casos como éste es que primero se debate y se vota la enmienda a la totalidad (ya que, en caso de prosperar, ya no tendrá sentido debatir la moción original) y sólo si no consigue la mayoría de votos se pasa a leer, debatir y votar la moción.
La propuesta impulsada por el grupo IU-Equo-Más Madrid y apoyada por PSOE y Podemos, venía a decir cosas muy parecidas a las que se han planteado en el Pleno en esta legislatura: hacía un recorrido histórico por las promesas incumplidas del Gobierno regional acerca de la construcción del centro, ponía en valor la urgente necesidad de la misma y el ofrecimiento municipal para firmar con la Comunidad un convenio por el que el Ayuntamiento se hiciese cargo de la construcción, y hacía hincapié en el hecho de que las promesas al respecto por parte de la Comunidad de Madrid no sólo habían sido hechas al Consistorio ripense, sino también al Defensor del Pueblo. Además, rechazaba los plazos que para esa construcción ha planteado la consejería de Sanidad, de forma un tanto errática, en las últimas semanas. Primero respondió a la pregunta del Ayuntamiento acerca de esos plazos, diciendo que se preveía que estuviera construido para el primer trimestre de 2029. Unos días después, ante la indignación producida por ese anuncio en diversos sectores de Rivas, daba una nueva fecha: julio de 2027. Ni una ni otra fecha parecía ni siquiera medianamente razonable a los grupos proponentes de la moción.
La enmienda del Partido Popular, presentada por su portavoz, Janette Novo, obviaba pronunciarse sobre esa inmediatez que la moción original reclamaba, y se limitaba a pedir que los plazos de construcción «se acorten», aunque sin especificar en qué medida ni hasta qué fecha aproximada. Por otro lado, la enmienda incidía sobre todo en la falta de profesionales médicos que se da en toda España y proponía reclamar al Gobierno central la adopción de medidas urgentes para garantizar la solución a ese problema. Se podía interpretar que la intervención de Novo venía a decir que el verdadero problema para construir el cuarto centro podía estar más en la previsible falta de médicos para dotarlo de personal, que en la construcción en sí.
El debate de la enmienda transcurrió, en un primer momento, en un tono más o menos correcto. Sin embargo, a partir de cierto momento la cosa cambió de color: comenzó a haber diferentes cruces de acusaciones entre la portavoz del PP y el de Ciudadanos, Jorge Badorrey, poniendo la dirigente popular en cuestión la competencia política de Ciudadanos basándose en que habían sido echados del Gobierno regional. Badorrey le recordó que algunos miembros del equipo de Ciudadanos en aquél primer gobierno autonómico de esta legislatura, habían sido cooptados por el Ejecutivo de Díaz Ayuso, lo que, según el dirigente de la formación naranja, no avalaba las palabras de Novo. También recordó que otros consejeros de Ciudadanos no fueron cooptados, especialmente Alberto Reyero (que había sido responsable de la consejería de Asuntos Sociales y, por tanto, de las residencias de Mayores durante la pandemia) después de que denunciara las directrices de la consejería de Sanidad para no trasladar a los ancianos a hospitales.
Siguiente paso en la escalada verbal: los grupos del Gobierno local muestran su extrañeza por el hecho de que el PP de Rivas presente una enmienda en contra de la moción, cuando en otras ocasiones había estado dispuesto a posicionarse a favor. Vanessa Millán, de Podemos, eleva el tono al mostrarse «muy enfadada» por la actitud del PP. Novo pone sobre la mesa otro argumento: la poca fiabilidad que el Ejecutivo municipal ofrece al regional, basándose en cuestiones como los encierros que con diferentes motivos ha protagonizado tanto en esta legislatura como en la anterior. O en las manifestaciones, que Novo considera poco respetuosas y desleales, de desprecio hacia la Administración regional. María de los Ángeles Guardiola da un paso más en la escalada e insinúa que es normal que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso no quiera facilitar a Rivas lo que la ciudad necesita, porque está gobernada por la izquierda. Escándalo en las filas de IU, PSOE y Podemos. La Alcaldesa, Aída Castillejo, interviene en tono muy escandalizado por lo que considera un «chantaje» a Rivas.
A pesar de una oferta de la portavoz del PSOE, Mónica Carazo, en el sentido de incluir en la moción original lo que parecía estar en el centro de la enmienda (el reclamo al Gobierno central de que adopte medidas urgentes para solucionar el déficit de profesionales médicos), la portavoz del PP no responde a la misma. Tampoco el resto de grupos proponentes de la moción parecen recoger el guante de la portavoz socialista y no hacen mención a la oferta.
Se vota la enmienda, con el resultado previsible: decae gracias a los votos de IU-Equo-Más Madrid, PSOE y Podemos, pero también con los votos contrarios de Ciudadanos. Sólo los dos votos del grupo Popular y los dos de los concejales no adscritos apoyan la enmienda.
Se pasa a debatir, por tanto la moción original, presentada por la concejala de Salud, Carmen Rebollo. En realidad, todos los argumentos habían sido expuestos en el debate de la enmienda. Se vota la moción y sale adelante. Pero quedó flotando en el ambiente la posible influencia que la proximidad de las elecciones municipales vaya a tener en los posicionamientos de unos y otros de aquí hasta mayo de 2023.
Presencia de Rivas con la Sanidad Pública
Otro elemento que pareció no gustar a la portavoz del PP fue la presencia en el salón de plenos de miembros de la plataforma Rivas con la Sanidad Pública. La entidad había solicitado, tal como está contemplado en el reglamento municipal, intervenir al final de la sesión oficial, una vez que el Pleno, como tal, ha concluido.
Janette Novo hizo, durante el debate de su enmienda, algunas alusiones a lo que entiende que ha sido una conducta de «acoso» e «insultos» en redes sociales por parte de esta plataforma a lo largo de las últimas semanas. Las alusiones las hizo con la presencia de la decena de miembros de la plataforma que habían acudido al Pleno con mucho tiempo de antelación. Llegado el punto de debate sobre la moción sobre el cuarto centro de salud, y en consecuencia también sobre la enmienda planteada por el PP, las personas de Rivas con la Sanidad Pública mostraron su pancarta en silencio.
Al finalizar el Pleno, cuando se invitó a Javier Tabarés, que intervenía en representación de la plataforma, a realizar su intervención (que se centraba en la situación de Rivas respecto a los centros de salud y coincidía en casi todos los aspectos con la moción original planteada por IU-Equo-Más Madrid, PSOE y Podemos), Janette Novo y el otro concejal popular, Francisco Gallardo, se levantaron de su asiento y salieron del salón de Plenos, junto a la concejala de Vox.
La intervención del representante de Rivas con la Sanidad Pública fue precedida de una breve alocución en la que echó en cara a «una concejala, cuyo nombre no mencionaré» la intervención que había tenido en el Pleno del pasado mes de marzo acusando a la concejala de Salud de mentir cuando ésta planteó, en aquél entonces, los incumplimientos que la consejería de Sanidad había tenido respecto al cuarto centro. Sin embargo, muy poco después de mencionar estas cuestiones, sí que mencionó el nombre de Janette Novo como objeto de sus críticas.
Tabarés dijo que «esa concejala mintió, insultó, acusó en falso, manipuló datos, y todo con un tono muy agresivo» a la concejala Carmen Rebollo, «diciendo que había ocultado información». Tabarés exigió, ya sin los dos concejales del PP presentes, que «esa concejala pida perdón y disculpas a toda la Corporación municipal, a la plataforma [Rivas con la Sanidad Pública], a las vecinas y vecinos y especialmente a la concejala Carmen Rebollo».
La Alcaldesa le pidió que, no estando la concejala presente, se abstuviera de referirse a ella. El representante de la plataforma finalizó su alocución en ese momento y comenzó a leer la intervención que traía escrita.