La sesión aprobó, con el único voto en contra de la concejala de Vox, solicitar un convenio con el Ayuntamiento de Madrid sobre el vertedero de Valdemingómez que permita solucionar el conflicto al respecto de los residuos. También se aprobó una declaración institucional para la defensa de la igualdad entre las parejas de hecho y los matrimonios en el acceso a la pensión de viudedad.
El Pleno ordinario correspondiente al mes de diciembre, celebró esta mañana la que ha sido la última sesión del año en la Casa Consistorial del Casco Antiguo. Comenzó, como es habitual, con un minuto de silencio de la Corporación y del público asistente en recuerdo a las mujeres asesinadas este mes por violencia machista. En cuanto a los asuntos destacados, el Pleno aprobó una declaración institucional, a propuesta del grupo Ciudadanos, para la defensa de la igualdad entre las parejas de hecho y los matrimonios en el acceso a la pensión de viudedad.
También el Pleno de Rivas aprobó, sin ningún voto en contra, lo que será el área de actuación definitiva para la parcela de 12.000 metros cuadrados ubicada en el número 94 de la avenida José Hierro. Es una parcela particular que tendrá uso terciario con área asistencial (sanitaria) y residencial, zona comercial y zona de despachos profesionales. La edificabilidad recogida en la ordenación urbanística aprobada será de casi 40.000 metros cuadrados. Esta parcela generará actividad económica y de nuevos servicios para la localidad, dentro de la estrategia municipal de atraer empresas a la ciudad que puedan generar empleo directo e indirecto en Rivas.
La parcela albergará el proyecto de construcción de un hospital privado, que se complementa con un edificio de oficinas de alto nivel, más una residencia privada para personas mayores. La portavoz socialista, Mónica Carazo, pidió al Gobierno la aclaración sobre el uso al que se piensa dedicar esta parcela. La respuesta del concejal de Urbanismo y del Alcalde fue en la misma línea: lo que se construya en esas parcelas y sus características exactas dependerá de la decisión de quienes tienen la propiedad de las mismas o aquellos a quienes hayan cedido legalmente sus derechos. Lo único que el Ayuntamiento puede vigilar es que los usos de lo que se quiera construir sean acordes con aquellos que el Plan General de Ordenación Urbana tiene previstos para los terrenos, y para que se cumpla la normativa vigente en la construcción de las edificaciones y uso de las mismas.
Procurar un acuerdo con Madrid para verter en Valdemingómez
Además, el Pleno aprobó, con un único voto en contra (el de la concejala de Vox), la moción propuesta por Izquierda Unida-Equo-Más Madrid, grupos Socialista y Ciudadanos (C’s), para solicitar un convenio con el Ayuntamiento de Madrid sobre el vertedero de Valdemingómez, que permita establecer las relaciones bilaterales entre ambas administraciones y solucionar el conflicto respecto a los residuos sólidos urbanos (RSU). El convenio instará al Ayuntamiento de Madrid a tomar medidas para gestionar los residuos de nuestra ciudad de manera justa y acorde con la deuda histórica que Madrid capital mantiene con Rivas, tras haber estado vertiendo en la localidad durante años en el antiguo vertedero de Autocampo.
El debate sobre esta moción, apoyada también por Podemos, adoleció de una cierta confusión respecto a la cuestión central de la misma. Tanto la concejala de Vox como la portavoz del PP recriminaron a los grupos que apoyaban la moción (IU-Equo-Más Madrid, PSOE y Ciudadanos, más las dos concejalas de Podemos) que se hubiera seguido «una política de confrontación y amenazas» frente al ayuntamiento de Madrid, cuando «este tema no debería ser tratado bajo el prisma de la ideología», dijo Janette Novo, del PP. La concejala tuvo un lapsus cuando recriminó especialmente a Vanessa Millán, portavoz de Podemos, el hecho de que «no se le esté exigiendo este acuerdo a Madrid por parte de sus compañeros de Más Madrid». La concejala popular olvidaba que Podemos (a quien representan en el Ayuntamiento de Rivas Vanessa Millán y Amaya Gálvez) no se presentó a las elecciones municipales en la capital, para evitar una mayor división del voto después de lanzarse la candidatura de Más Madrid como un partido diferente. Tampoco en Rivas Podemos se presentó junto con Más Madrid, sino que este último partido lo hizo en coalición con IU y Equo.
A pesar de todo ello, la posición de Novo quedó fijada en términos de «queremos que haya un acuerdo con Madrid, pero no que se presente en términos de confrontación» en función de quién es el interlocutor. Su abstención y la de su compañero de partido en la votación final plasmó su voluntad de no oponerse a la búsqueda el acuerdo, cosa que no puede decirse de la concejala de Vox, que votó en contra con una argumentación basada en que «no podía estar segura de que ese acuerdo fuera a beneficiar únicamente a la gente de Rivas».