El debate que Rivas Aire Limpio organizó el pasado 29 de junio acerca de las alternativas viables para el tratamiento de los residuos fue un auténtico éxito de público, con la sala de actos de la Casa de Asociaciones totalmente llena. En la práctica, el debate se centró sobre la tecnología para la Planta de Residuos cuya investigación está apoyando el Ayuntamiento. Primeras espadas de la política ripense, como el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Guillermo Magadán, el concejal de Ciudad, Fausto Fernández (IU) o el también edil de IU Raúl Sánchez, fueron algunas de las personas que llenaron la sala y opinaron respecto al tema.
Algo más de 80 personas abarrotaron el salón de actos de la Casa de Asociaciones de Rivas el miércoles 29 de junio, para asistir a uno de los debates que más está atrayendo la atención de las y los ripenses en los últimos tiempos: lo realista de las previsiones que la empresa pública Rivamadrid tiene respecto a la tecnología de tratamiento de residuos que la empresa Ecohispánica está investigando en Rivas.
El gerente de Rivamadrid, José Gómez, participó en el debate explicando las características de esta tecnología y los resultados que esperan obtener con ella en el aspecto de la separación y reducción de volúmenes de basura. Junto a él, en la mesa, Javier Navascués, de Rivas Aire Limpio, Miquel Crespo, experto en tratamiento de residuos, y Elena Rojas, de Ecologistas en Acción, expusieron sus opiniones que oscilaban entre el escepticismo y la negación abierta respecto a algunas de las previsiones de Rivamadrid.
Un asistente aseguró que las declaraciones que el Alcalde, José Masa, realizó recientemente respecto a una marcha atrás de Greenpeace y Amigos de la Tierra en lo tocante a la carta que ambas organizaciones firmaron en plena campaña electoral oponiéndose a la Planta de Residuos, habían sido desmentidos por responsables de esas organizaciones. RIVAS ACTUAL, que se hizo eco de esas declaraciones en una entrevista a Masa publicada en el número 16 de la edición impresa de la publicación, no ha podido constatar tal retracto por parte de los responsables de Greenpeace ni de Amigos de la Tierra, que no contaron con ningún representante en la mesa de debate.