El billete sencillo de autobús podrá pagarse en Rivas con tarjeta bancaria «a comienzos de año»

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Un autobús de la línea 333 (Foto archivo)

El sistema de pagos para el billete sencillo se suma a los ya disponibles para títulos de 10 viajes, billetes turísticos y el suplemento del aeropuerto. De forma más inmediata podrá usarse en Arganda, San Lorenzo de El Escorial, Torrejón de Ardoz y Pozuelo de Alarcón. En junio de 2025 se prevé que esté operativo en el conjunto de la red de autobuses interurbanos.

La Comunidad de Madrid implementó ayer un nuevo sistema que permite pagar el billete sencillo en autobuses urbanos utilizando tarjetas bancarias. Esta medida ya está disponible en cuatro municipios: San Lorenzo de El Escorial, Torren de Ardoz, Pozuelo de Alarcón y Arganda del Rey. El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, visitó San Lorenzo de El Escorial para comprobar de primera mano los avances de esta iniciativa.

Rodrigo también destacó que a principios del próximo año este servicio llegará a localidades como Móstoles, Rivas Vaciamadrid, Torrelodones, Valdemoro, Tres Cantos, San Sebastián de los Reyes y Alcobendas. Según sus palabras, los usuarios podrán realizar transacciones seguras y cómodas sin necesidad de llevar efectivo. El proyecto contempla que toda la red de vehículos interurbanos esté adaptada a este sistema digital para junio de 2025.

Con esta actualización, los pasajeros podrán abonar su viaje mediante tecnología contactless, ya sea con tarjeta bancaria o a través del teléfono móvil. Además, desde noviembre pasado, el Gobierno regional ha habilitado el pago digital en dispositivos con sistema Android 7.0 para títulos de 10 viajes, billetes turísticos y el suplemento del aeropuerto.

El objetivo principal del Ejecutivo autonómico es «digitalizar y modernizar el transporte público en la región, extendiendo este formato de pago a todos los sistemas», según la nota de prensa hecha pública por el Gobierno regional. Actualmente, la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Madrid ya utiliza este método, mientras que Metro trabaja para que sea viable en sus tornos a partir de 2026. De este modo, se espera que en dos años «esta modalidad más cómoda y eficiente sea una realidad en toda la red de la Comunidad de Madrid».