Tras la reciente resolución del Consejo de Europa contra España por la falta de luz en la Cañada Real, Rivas propone la constitución de un consorcio entre las distintas administraciones implicadas como la solución más eficaz. La propuesta de Rivas busca acelerar el plan de realojos y garantizar el suministro eléctrico hasta la finalización del proceso.
El Ayuntamiento de Rivas ha hecho público esta mañana un comunicado en el que propone, tras la reciente resolución del Consejo de Europa contra España por la falta de luz en la Cañada Real, la constitución de un consorcio entre las distintas administraciones implicadas para «avanzar y agilizar la solución para la zona y garantizar los derechos fundamentales de su población«. Esta figura, regulada en la Ley 40/2015 del Régimen Jurídico del Sector Público, permite a varias administraciones públicas actuar de manera coordinada y con una gestión eficiente para abordar competencias de interés común.
La alcaldesa de Rivas Vaciamadrid, Aída Castillejo, ha defendido la necesidad de este instrumento: “El Consorcio hace posible que la solución a Cañada se agilice para garantizar el derecho a una vivienda digna cuanto antes, al tiempo que también se garantiza el suministro eléctrico hasta que finalice el conjunto de realojos”. Según Castillejo, la creación de este consorcio asegurará una gestión más eficaz de los recursos destinados a la Cañada Real.
Resolución del Consejo de Europa
La propuesta del Consorcio se produce en un contexto marcado por la reciente resolución del Consejo de Europa, que ha condenado al Gobierno de España por la falta de luz en Cañada. Para el Ayuntamiento de Rivas, esta resolución es «preocupante», ya que «pone de manifiesto una vulneración de derechos que requiere soluciones inmediatas». En este sentido, Rivas reitera que «el suministro eléctrico en la Cañada debe garantizarse mientras se completan los realojos previstos».
Actualmente, en los sectores 4 y 5 de la Cañada, situados en el término municipal de Rivas, hay suministro eléctrico, aunque con problemas puntuales debido a la sobrecarga de la red por cultivos ilegales así como por el incremento poblacional debido al efecto llamada. Para coordinar las acciones en la zona, el Ayuntamiento constituyó la mesa vecinal de Cañada, donde las asociaciones que representan a vecinos y vecinas, así como las entidades que intervienen, junto al Comisionado de Ciudad, ponen en común los problemas del día a día. “No podemos permitir que estas situaciones sigan perjudicando a las familias. Necesitamos recursos y una gestión coordinada que el Consorcio puede ofrecer”, ha señalado la Alcaldesa.
Un plan de realojos imprescindible
El Consorcio tendría como prioridad «acelerar la ejecución del plan de realojos establecido en el Pacto Regional de la Cañada Real», que cuenta con una dotación de 330 millones de euros para los próximos diez años. Este plan, que se está desarrollando con la coordinación de todas las administraciones, es «clave para garantizar el derecho a una vivienda digna de las familias que residen en uno de los mayores focos de exclusión social de Europa». El Ayuntamiento de Rivas «continúa trabajando para ejecutar su parte del plan de realojos, dando acceso a la vivienda digna a las familias más vulnerables de Cañada, tanto en Rivas como en otros municipios de la región».
En paralelo, reitera su compromiso con «la defensa de los derechos fundamentales de los vecinos y vecinas de la Cañada Real», especialmente en un contexto en el que «el invierno agrava la situación de vulnerabilidad». En este sentido, “el Consorcio permitiría una implicación directa del Gobierno central en la gestión, asegurando que los fondos transferidos a la Comunidad de Madrid se traduzcan en soluciones concretas”, explica Castillejo. “Por ello – reitera la alcaldesa – es el mejor instrumento para agilizar la solución y garantizar una vida digna para las personas que residen en esta zona”.