Mal cierre de año para Uros de Rivas, que sufrió un dura derrota 64-92) a manos de NCS Alcobendas, equipo que firmó un soberbio partido para marcharse de vacaciones refrendando su liderato.
Desde el principio empezó mandando el cuadro alcobendense con un juego ofensivo dinámico y acertado, dos triples marcaron las primeras diferencias con el partido recién iniciado, 2 a 8. Por los locales era Álvaro Frutos quien capitalizaba casi todo el juego ofensivo hasta que la segunda falta personal le llevaba al banquillo. Con 11 a 13 en el electrónico el partido andaba muy equilibrado pero entró en unos momentos de desacierto en los que Uros desaprovechó múltiples opciones de haberse adelantado. Un triple de Jorge Parra rompió la sequía en favor de un equipo visitante que estiraría su ventaja hasta el 11 a 20 con que se cerró el primer cuarto aprovechándose de los más de 5 minutos que pasaron los locales sin anotar.
Empezó bien el segundo periodo para Uros, dos buenas acciones defensivas permitieron a los ripenses anotar y acercarse en el marcador pero, de nuevo, a la hora de completar la recuperación el acierto era esquivo para los locales, 7 de 15 tiros libres y ningún triple anotado era escaso bagaje para hacer frente al potencial de un líder que poco a poco abría brecha en el electrónico con un juego ofensivo variado y eficaz, el 8º triple en el partido de los visitantes llevaba al marcador un explícito 22 a 39. El primer acierto exterior de Uros llegaba de la mano de Javier De Pinto a 8 segundos del final del periodo para llegar al descanso con una buena noticia a pesar del 29 a 43 que reflejaba el marcador.
Al regreso de los vestuarios un intercambio de aciertos desde el exterior dio paso a un parcial de 7 a 0 que daba esperanzas a Uros de poder pelear el partido pero la respuesta de Alcobendas fue contundente. La defensa visitante se hacía más y más difícil de superar en cada ataque y el parcial de vuelta de 2 a 11 disparó la ventaja alcobendense obligando a Juanjo Simón a parar de nuevo el partido en busca de unas soluciones que no llegaron. Con 46 a 68 se llegó al final del 3er cuarto. Para que no quedaran dudas un 2+1 sobre la bocina en la jugada inicial y un mate tras robo en la acción posterior echaron el cierre a un partido en el que Uros no encontró argumentos frente a un rival que rindió a gran nivel en todos los aspectos del juego y por parte de todos sus jugadores. Lo peor del final del partido fue la lesión de un Pablo Gimenez al que deseamos una rápida y satisfactoria recuperación.
La competición se toma ahora un pequeño respiro para regresar en 2020 con el final de la primera vuelta y una segunda que promete ser apasionante.
