La moción, titulada «Contra la segregación de algunos barrios de la Comunidad de Madrid», fue presentada por el procedimiento de urgencia por los tres grupos que forman parte del Gobierno local. Tanto Ciudadanos como PP argumentaron que un acuerdo de la Junta de Portavoces impedía a los grupos presentar más de una moción por Pleno, aunque también declararon que la moción estaba destinada a «atacar al Gobierno de la Comunidad» por las restricciones selectivas realizadas.
Al final del Pleno municipal ordinario del pasado jueves se dio una situación pocas veces vista en Rivas: dos grupos municipales, el de Ciudadanos y el del PP, se ausentaron al completo del mismo como protesta por la presentación de una moción de urgencia que presentaban los tres grupos que forman parte del Gobierno: IU-Equo-Más Madrid, PSOE y Podemos.
Tanto el portavoz de Ciudadanos, Bernardo González, como la del PP, Janette Novo, argumentaron que un acuerdo de la Junta de Portavoces suscrito en 2017 señalaba que ningún grupo podía presentar más de una moción por Pleno, y que, por tanto, la moción presentada por vía de urgencia, incumplía, de aceptarse, dicho acuerdo. El argumento de los grupos proponentes era que el acuerdo mencionado no cincluía las mociones de urgencia, que por su propia naturaleza no podía saberse que se iban a presentar hasta el último momento.
Pero además de esta argumentación formal, tanto González como Novo dejaron ver, en sus intervenciones oponiéndose a la aceptación de la moción, otra razón que parecía tener más peso: el objeto de la moción era reprobar, calificándolas de «segregadoras», las restricciones selectivas que el Gobierno regional puso en marcha el lunes pasado afectando a 37 zonas y barrios de la Comunidad. Ambos portavoces criticaron que se trataba de una moción que no reunía ningún carácter de urgencia y que su único objetivo era «atacar al Gobierno regional». Toda vez que la votación mayoritaria del Pleno aceptó la urgencia de la moción (paso previo al debate y votación del contenido de la misma), tanto los cinco concejales de Ciudadanos (que lo hicieron en primer lugar) como los dos del PP, se retiraron del Pleno. Como éste era telemático, la ‘ausencia’ consistió en desconectarse del debate mientras éste tuvo lugar.
«Segregación»
La moción, que sí contó con la presencia en el debate de la concejala de Vox y del concejal no adscrito, Antonio Sanz, resultó aprobada por 15 votos a favor de IU-Equo-Más Madrid, PSOE y Podemos; un voto en contra de la concejala de Vox, María de los Ángeles Guardiola; y una abstención del concejal no adscrito.
En su presentación, Aida Castillejo, de IU-E-MM, explicó que la urgencia de debatirla venía dada porque «es hoy cuando se está segregando a estos barrios madrileños». La concejala de IU recordó que las razones por las que los barrios «segregados» por el Gobierno regional mantienen tasas de personas infectadas por el COVID más altas que en otras zonas, tienen que ver con que son «los barrios más pobres», con peores condiciones de vivienda y de servicios, y cuyos vecinos «están obligados a ir a trabajar en medios de transporte atestados». También recordó que «es la gente que tiene que enfrentarse a una reducción drástica de la atención primaria, la única a la que pueden acceder», a diferencia de los habitantes de zonas más ricas, que pueden contar con sanidad privada. La concejala finalizó el debate asegurando que «la gente de esos barrios segregados debe saber que Rivas está con ella».