Por segundo año consecutivo el CEIP Mercedes Vera y la ampliación del CEIPSO La Luna siguen sin materializarse. La Comunidad lo ‘soluciona’ con más barracones, varios de ellos en condiciones «vergonzosas», según la alcaldesa de Rivas.
Indecente. No hay otro calificativo para la situación en que la consejería de Educación de la Comunidad de Madrid pone al alumnado de una parte de Rivas Vaciamadrid. Tanto en el CEIPSO La Luna como en el CEIP Mercedes Vera, la desidia del gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha hecho que, por segundo año consecutivo, una parte cada vez mayor del alumnado se encuentre sin espacio para recibir la enseñanza en centros públicos en unas mínimas condiciones de dignidad.
En el caso de La Luna, las obras de ampliación del CEIPSO de ese barrio fue la causa de que el pasado curso se instalaran barracones para dar cabida al alumnado que debería haber estado en sus clases ‘normales’, en instalaciones normalizadas. En este nuevo curso, esas obras, un año después, siguen sin terminarse, pero la cantidad de alumnado que opta por el centro ha aumentado. La solución de la administración regional es más de lo mismo. Este curso 2022-23 ha aumentado el número de barracones, llenando prácticamente la explanada destinada a espacio de recreo y actividades diversas.
En el CEIP Mercedes Vera (el que la Comunidad de Madrid se negó a reconocer con este nombre elegido por votación de la ciudadanía ripense, imponiéndole el de ‘Hispanidad’), que quedará ubicado -cuando se termine- en pleno barrio Centro de la ciudad, las obras avanzan a paso de tortuga, con una escandalosa falta de personal en la construcción del mismo. El resultado es que, también por segundo año consecutivo, el centro educativo no está disponible. De hecho, en todo un año, la Comunidad de Madrid apenas ha levantado el esqueleto del edificio principal. A ese ritmo, es dudoso que esté disponible para el alumnado en el próximo curso 2023-24.
Y todas las familias cuyos hijos e hijas, de manera natural, querrían recibir su educación en ese centro, se ven obligadas a acudir a un centro próximo ya existente, el CEIP Dulce Chacón. Y también allí, la solución de la Comunidad para ese exceso de población estudiantil es la de los barracones. Han añadido más, y de nuevo utilizando el método de los barracones. Más que en el curso pasado, claro está, porque la demanda ha aumentado. Los nuevos barracones registraban ayer, ya a las 19:30 horas, una temperatura interior próxima a los 30 grados centígrados, y eso después de haber sido un día particularmente templado y de haber estado ventilándose durante horas, tras las clases de la mañana. Las instalaciones provisionales no tienen acceso directo a los cuartos de baño, aunque la edad de los alumnos y alumnas que se ven obligados a utilizarlas es muy corta, con el consiguiente problema cada vez que alguno de ellos necesita utilizarlos. O tienen que ir solos, recorriendo el trozo de patio en que están ubicados los barracones, y después recorrer las instalaciones fijas del colegio, o el profesor o profesora deberá acompañarles, con la consiguiente pérdida de tiempo e interrupción de las clases.
Condiciones «vergonzosas»
Ayer por la tarde, la Alcaldesa de Rivas, Aída Castillejo, realizó una visita tanto al CEIPSO La Luna como al CEIP Mercedes Vera, para comprobar de primera mano las condiciones en que el alumnado de ambos centros se ve obligado a recibir sus clases y a realizar sus actividades escolares.
Estuvo acompañada en la visita por la Vicealcaldesa, Mónica Carazo, por la portavoz de Educación de Más Madrid en la Asamblea de Madrid, María Pastor, y el vice-portavoz del Grupo Socialista en la misma, Jesús Celada, así como Carmen Barahona, diputada del PSOE en la Asamblea de Madrid y responsable en ese grupo de los temas relacionados con la zona Sureste de la Comunidad. También por el concejal de Educación y portavoz de IU-Equo-Más Madrid en el Ayuntamiento de Rivas, José Luis Alfaro, y la portavoz de Podemos Rivas, Vanessa Millán, además de una nutrida representación de concejales y concejalas ripenses del PSOE e IU.
Todo el grupo recibió, tanto en el CEIPSO La Luna como en el CEIP Mercedes Vera, explicaciones detalladas de la situación a la que los barracones abocan al alumnado en ambos centros, por parte de representantes de la FAPA Rivas. Jaime de León, presidente de la misma, explicó que “La situación es insostenible”. “Vamos a ver a muchos niños y niñas que cuando salgan del colegio no van a tener sensación de haber pasado por uno”, añadió.
Este es, según denuncia la AMPA de La Luna, “el sexto curso que el colegio comienza sin terminar, y ahora con más problemas en cuanto a espacios”, algo que en su opinión repercute en la educación de sus hijos e hijas: “Nadie quiere que reciban clase rodeados de barracones y obras”.
La Alcaldesa tildó la situación creada por la Comunidad de «vergonzosa». “Siempre es la escuela pública quien sufre estos ataques del Gobierno de la Comunidad de Madrid, nadie entiende que la Consejería de Educación no atienda estas cuestiones”, ha dicho para añadir que “quizás la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, pueda explicarnos en el próximo debate del estado de la región por qué los centros están así”.
Jesús Celada comentaba, durante la visita al CEIP Dulce Chacón, que «en la Asamblea no se conoce nada de esta situación, es como si no existiese».
Injustificable lentitud en las obras
Castillejo aseguró que “nada de esto estaría sucediendo si desde la Comunidad de Madrid hubieran aceptado un convenio según el cual el Ayuntamiento podría haber adelantado la construcción del nuevo colegio”. “Con los barracones lo único que conseguimos es la pérdida del derecho a una educación digna para nuestros niños y niñas”, afirma.
“La Luna – continúa Castillejo – fue el único centro que entonces la Comunidad pudo inaugurar en tiempo y forma, y fue gracias a que lo levantamos desde Rivas, algo que nunca sucede cuando es el Gobierno regional quien se encarga de las obras”.