El pasado sábado eran atropellados dos triatletas del club ripense Diablillos de Rivas Mar de Pulpí en la Valdemoro en la M-423, cerca del Hospital de Valdemoro, mientas entrenaban ciclismo junto a un amigo.
Los hermanos Iván y Aarón Bravo del club ripense de triatlón Diablillos de Rivas Mar de Pulpí eran víctimas el pasado sábado 29 de diciembre de un atropello junto a su amigo Alberto Navarro mientras entrenaban con la bicicleta, por suerte sin graves consecuencias.
Los hechos ocurrían a la altura del hospital de Valdemoro en la M-423 cuando llevaban recorridos unos 5 km en una vía de doble sentido y con un arcén de más de 1,50. Según nos cuenta a RA el propio Iván: “La idea era hacer una hora y media suave, ir a San Martín tomar un café y volver a Rivas para despidiéndonos así del 2018… Cuando un coche nos arrolló por detrás”.
Iván nos sigue contando que circulaba junto a su hermano Aarón en paralelo justo detrás de sus amigos pero sin invadir en ningún momento el carril derecho ya que esta carretera tiene dos carriles para cada sentido. Cuando de repente escuchó un gran golpe y continuación notó como algo lo golpeaba y salía despedido hacia adelante, quedando tirado en la carretera algo conmocionado. Continúa Iván relatando que cuando fue capaz de reaccionar vio a su amigo Alberto como 10 metros por delante de él tirado en el suelo y a su hermano Aarón “atacado” intentando que su amigo le respondiera.
Unos metros más adelante paraba el vehículo implicado conducido por un varón y dos menores en los asientos traseros, quien se bajaba del visiblemente afectado según los testigos. Además, también paraba otro vehículo que circulaba detrás y que presenció todo lo ocurrido. Finalmente, según ha sabido RA, el conductor reconocía ante la G. Civil que iba distraído con sus hijos, al parecer por una consola o dispositivo digital que estaban usando.
Iván termina contando que las ambulancias tardaron muy poco tiempo en llegar, quizá por la proximidad al Hospital de Valdemoro, y que fue trasladado a ese Hospital registrando una rotura de la cabeza del radio a la altura del codo y diversas contusiones y heridas por todo el cuerpo, estando casi 24 horas en observación. Por su parte, Alberto Navarro sufría una fisura en un pie y una brecha en la cabeza. El hermano de Iván, Aarón Bravo resultaba ileso.