El concejal de Hacienda destaca el «cumplimiento de todos y cada uno» de los parámetros exigidos para una correcta gestión municipal. La Cuenta arroja un remanente de más de 23 millones, un plazo medio de pago a proveedores de 23,4 días de media y una rebaja sustancial en el endeudamiento.
La Cuenta General del Ayuntamiento correspondiente a 2021 fue aprobada ayer en el Pleno municipal. Este documento resume el nivel de cumplimiento de lo previsto en el presupuesto municipal correspondiente a ese año, tanto en los capítulos de ingresos como en los de gastos.
El concejal de Hacienda, José Manuel Castro, ha destacado que la Cuenta pone en evidencia el «cumplimiento de todos y cada uno» de los criterios que la actual legislación impone a las administraciones locales para calificar su gestión de correcta. El remanente de tesorería, un nivel de ingresos mayor al de gasto, la reducción de la deuda o el cumplimiento del plazo medio de pago a proveedores cumplen o mejoran los indicadores establecidos.
El grado de ejecución del presupuesto municipal de 2021 avala, según la nota emitida por el Ayuntamiento, que «tanto ingresos como gastos se ajustan a la realidad económica de la ciudad». La ejecución de los gastos «tiene una desviación positiva que alcanza una media global del 108,33%, mientras que el grado de ejecución del gasto corriente general superó el umbral del 95,8%». Así, durante el ejercicio de 2022, se incorporaron al presupuesto 17,5 millones de euros procedentes de los remanentes de tesorería del ejercicio anterior, que arrojó un superávit de 15,7 millones de euros.
La Cuenta General fue aprobada por 16 votos a favor de los grupos que forman el Gobierno municipal (IU-Equo-Más Madrid, PSOE y Podemos), 4 en contra (PP y los dos concejales no adscritos) y 5 abstenciones (Ciudadanos y Vox)