Día del Pilar. Día grande para la Guardia Civil. El destacamento de Rivas Vaciamadrid celebró en la jornada de ayer, y como es tradicional, la festividad de su patrona con una misa y los posteriores actos en el acuartelamiento.
La celebración comenzó a las 11:30 horas en la parroquia de Santa Mónica con la misa oficiada por el párroco titular, Jesús de la Cruz, al que se le impuso por parte del teniente jefe del destacamento de Rivas la medalla conmemorativa del Centenario de la Virgen del Pilar como Patrona de la Guardia Civil.
Mientras se celebraba la misa, en la calle caía una fina lluvia que hacía presagiar que, al igual que el año pasado, no se pudieran realizar al aire libre los actos en el acuartelamiento del Instituto Armado en Rivas. Sin embargo, al término del acto religioso el panorama meteorológico cambió totalmente y las nubes dejaron paso a un espléndido sol que permitió la celebración de los actos del acuartelamiento.
Formado el destacamento en el patio del cuartel, se pasó revista a los números, se izó la bandera y se entregaron diversas condecoraciones y diplomas a varios guardias del acuartelamiento por distintas actuaciones durante el año, así como a miembros de otras fuerzas del orden y a civiles.
Los actos oficiales concluían con el emotivo y solemne acto a los caídos en el que se deposita una corona en la base del mástil de la bandera sonando ‘La muerte no es el final’. El himno de la Guardia Civil cerró el acto.
En los actos se contó, en representación del Ayuntamiento, con la presencia del alcalde de Rivas, Pedro del Cura, y del concejal, Rubén Tadeo, en su responsabilidad de edil de Seguridad Ciudadana. También estuvieron presentes componentes del resto de fuerzas políticas de Rivas, un amplio número de componentes de Protección Civil y representantes de Policía Nacional y Policía Local.
Terminados los actos oficiales, un aperitivo y el tradicional vino español sirvieron para intercambiar charlas y pareceres en las cocheras del acuartelamiento, concluyendo así los tres días de celebraciones con los que la Benemérita de Rivas rinde un año más homenaje a su patrona.